En Busca de la felicidad

Capitulo 1

Estoy huyendo con mis camaradas, y vemos a una camioneta que al parecer algún tonto dejo con las llaves adentro,

- Que fácil nos la pusieron Mario.

- Si, si sube las bolsas del dinero apúrate Kevin, tuvimos mucha suerte pero apúrate, rompe el vidrio de la camioneta y entra ya! - grita Mario.

Estamos todos en la camioneta, Mario está en el volante, yo a su lado como copiloto y atrás David y leo, en eso llega un anciano, lleva un libro en la mano y va cargando una cruz.

- Lo que hacen está mal – sentencia el anciano en tono tranquilo

- Y quien lo dice tu? – reta al anciano Mario

- No, lo dice alguien que sufrió y murió por ustedes.

- Mire no me venga con sermones – dice nervioso Mario.

- Yo solo quiero darles a conocer que en la vida hay alguien que los ama y no quiere verlos asi.

- Mire mejor quítese sino quiere ir con ese Jesús si es que existe – dice apuntando con una pistola al anciano. Todos estamos muy nervioso y al ver la calma del anciano, no se me gustaría sentirme como el, con esa paz, no huyendo siempre.

- Yo estoy listo, seré que me iré con mi padre, pero ustedes?

- Mire mejor callase, que sabemos bien que su Dios no existe –dice bastante irritado y casi por apretar el gatillo, observo al anciano se ve en paz y no teme que Mario apreté el gatillo.

- No digan eso, Dios quiere entrar en ustedes pero ustedes deben abrir su corazón – alega el anciano.

Mario se arrepiente y bastante enojado prende el carro y salimos volando de ahí, dejando al anciano, pues nos siguen buscando la policía.

Estando bastante lejos empiezo a oír que todos se burlan del anciano.

- jajaja, creí que nos iba a aventar esa cosa de Jesús

- jajaja si hay gente tan estúpida que cree que un Jesús que no existe lo salvara –dice Mario con un tono de ira.

- No se veía tan convencido, vieron que no temía morir – digo yo pensando.

- Pero que dices Kevin no te vayas a poner así de loco que el anciano – dice burlándose David y todos se burlan.

Yo prefiero no decir nada y volvemos a nuestra guarida, nos compartimos el botín, y todos se van para su casa, yo me voy con Mario a casa de nuestra abuela.