Escapar

Correr y correr y correr era lo único que hacía. No sabía dónde estaba, pero quería salir a como diese lugar. Algo me perseguía, en la absoluta obscuridad solo podía ver esquinas al acercarme a ellas. Sin más fui a girar de nuevo hacia la derecha, lo que me perseguía era cada vez más rápido, solo podía pensar en escapar y sin darme siquiera cuenta me topé con un muro blanco "¿Volver?" Pensé frustrada, pero sin más decidí treparlo, incluso derivarlo en vano. Con un ruido sordo mi perseguidor se hizo presente, no había escapatoria, moriría allí sin saber nada o eso pensé hasta que vi que la extraña silueta que me perseguía se detuvo en la obscuridad "¿Está bien así?" Me susurré "¿De verdad quiero esto?" comencé a llorar que de nada servía. La sombra comenzó a poner expresiones dolorosas.

-¿Dónde estoy? -Traté de preguntarle y con una sonrisa estiró su, lo que a mi parecer era una mano- ¿Qué quieres? -Viendo que no iba a acercarme comenzó a tratar de pasar hacia la luz.

-...No... -Sollozaba de forma ruidosa por lo que me acerque un poco intrigada. La silueta, completamente negra trataba de alcanzarme inútilmente.

-¿Por qué debería dejarme llevar por ti? -Sin dejar de llorar seguía tratando de acercarse, algo me molestaba- ¡No hagas eso! -Mis ojos una vez secos comenzaron a lagrimear de nuevo- ¿¡Que estás haciendo!? ¿¡Por qué haces esto!?

-...Por qué te necesito...

Mi aliento salió disparado, sin previo aviso mi cuerpo dejó de acumular aire, tratando de respirar caí al suelo cerca de la silueta, sin poder moverme, sin hacer nada, solo sentía como esta me arrastraba de nuevo hacia la obscuridad. Noté el pinchazo en el brazo y un gran dolor inundar el mismo, pero mis ojos no se abrían, sentía mi interior desgarrarse de forma constante durante segundos que se asemejaban a siglos. Abrí mis ojos en cuanto me vi capaz, alguien sentado a mi lado, sabanas cómodas, muchos regalos y un feo paisaje, obviamente me encontraba en un hospital, pero no lograba recordar cómo había llegado hasta allí.

-¿Momo? -Preguntó el chico a mi lado- Momo... -Sin observar mucho pude adivinar que este había tratado de suicidarse, no fue hasta que entro mi madre en la habitación que recordé casi todo muy nerviosa.

-Roy -Me giré a verlo- Mama... Tenía miedo... -Y bajo el abrazo de ambos terminé de tranquilizarme.

-Ha habido varias complicaciones desde que quedaste en coma -Lloraba mi madre mirando a Roy el chico a mí lado.

-Lo siento... -Dijo muy arrepentido. No paso mucho rato hasta que mi madre salió a buscar a las enfermeras- Te vi... -Dijo mirando al suelo esperando una reacción.

-¿Me viste? -Pregunté.

-Ya sabes que intenté suicidarme. Antes de llegar a morir te vi... del lado iluminado... -Con algo de angustia recordé la sombra oscura que me arrastraba- Me alegro de que hayas vuelto -Sonreía con lágrimas que cubrían una sonrisa psicópata. -Definitivamente no podría haberme ido sin ti...

Recuerdo ese momento, el miedo invadió mi cuerpo, susonrisa cínica erizó mi piel por competo, corría para huir de alguien, pero no me fui "¿Hice lo correcto?".