1

18 2 0
                                    

Tampoco era para tanto, pero aquellas simples palabras, me dolieron y calaron hasta lo más profundo de mi alma...

No sabes cuanto lloré ese día...

Mis ojos no dejaban de humedecerse, pero tampoco te lo dije. Hice lo que siempre hago, fingir que no paso nada y aparentar estar bien...

Odio demostrar ser débil y sentimental... Realmente odio mis sentimientos...

No sabes cuanto lloro aun al ver  aquel peluche que jamas me atreví a enviar.

Me odio a mi misma.

Me odio, me repudio, soy la peor escoria.

El único consuelo al final es que se que voy a morir.

Se que no voy a ser extrañada.

Re UtilizableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora