Tenía esto perdido por mi ordenador y me he dicho, ¡Que cojones! Tengo todo el derecho del mundo de animarme a mí misma convirtiendo esta historia en un one-shot Warmi y eso es lo que he hecho. Sin más dilación aquí tenéis un AU que nadie necesitaba en el que Mimi y Ana trabajan como azafatas de vuelo en la misma compañía.
El problema de Mimi era... que Mimi tonteaba con todo el mundo. Desde los diferentes pilotos a los pasajeros más atractivos de ambos géneros hasta los camareros de las cafeterías del aeropuerto (Amaia siempre rodaba los ojos cada vez que lo hacía y le daba su café de siempre). Era su forma de ser, lo hacía de forma tan inconsciente como respirar, y el resto de trabajadores habían decidido que era algo inofensivo (aunque la forma tan obscena con la que decía 'Capitán Cepeda' hacía que Luis siguiera bromeando con ponerle una denuncia por acoso sexual), y los pasajeros solían estar tan encantados y embobados como para que les importara. Porque Mimi adoraba su vida y adoraba a la gente y era posiblemente la asistenta de vuelo más entusiasta que haya habido nunca.
También era cierto que la primera impresión que daba podía ser bastante intimidante. 'Intimidante' quería decir que Ana estaba un poco acojonada la primera vez que la vio y tuvo que trabajar con ella. Porque a veces Mimi era un poco demasiado y nunca dejaba de hablar de lo que fuera o dejaba de llamar la atención y a Ana no se le daba muy bien estar en el centro de las miradas o lidiar con las frases sugerentes que no dejaban de salir de la boca de la rubia.
La vida de Ana siempre había sido bastante tranquila hasta el momento (y seguía siéndolo, en realidad –ese trabajo no era tan genial y glamuroso como la gente creía, daba igual lo que Mimi dijera; el problema quizá no fuera el trabajo sino como miraba la vida ella- seguramente la vida de Mimi era igual de increíble cuando estaba dando vueltas a hamburguesas). Ana fue a la universidad, consiguió la típica carrera inútil y no supo que hacer a partir de ahí. Había basado su decisión en dos motivos principales: aburrimiento, y Jadel. Bueno, romper con él en realidad. Quizá él dijo que fue porque su relación no estaba yendo a ninguna parte, pero ella sabía la verdad, sabía que fue porque ella no estaba yendo a ninguna parte, que se había quedado estancada en el mismo hacía ya muchos años y que seguramente seguiría así unos cuantos más. Así que se paró a pensar en lo que quería, lo que de verdad quería hacer y que nunca antes había intentado por miedo o por falta de posibilidades. Y lo primero que le vino a la cabeza fue viajar. Era posiblemente la cosa más impulsiva que había hecho en su vida, presentarse a ese puesto de azafata.
Y sí, puede que fuera un trabajo animado con un toque de locura y que ocupara la mayor parte de su tiempo, pero le gustaba, le gustaba de verdad. Siempre se le había dado bien relacionarse con la gente (aunque quizá no tan bien como a Mimi, quien parecía que había nacido para eso), no le importaba tener que vivir a base de hacer maletas sin parar ni ir de aeropuerto en aeropuerto y pasar por los diferentes hoteles de toda Europa, además podía disfrutar de las diferentes vistas y los lugares más bonitos de cada ciudad cuando tenía un poco de tiempo. Le gustaba sentirse así, como que tenía un propósito y no sentirse inútil como lo había hecho durante tanto tiempo.
Casi nunca estaba en casa, eso era cierto, y cuando estaba llegaba muy pronto por la mañana después de haber pasado días lejos y se vuelve a ir por la noche, y eso le parece bien a Alfred, a quien le gusta estar solo y encerrarse en el piso que comparten, dedicarse a dormir todo el día y ponerse a trabajar en alguna de sus obras por la noche, llegando a emocionarse tanto con el arte que es capaz de olvidar el mundo exterior. A veces Ana sentía que vivían en zonas horarias completamente diferentes (aunque claro, la chica vivía en todas las zonas horarias existentes), como si se turnaran para ocupar el piso en vez de compartirlo. Hablaban más usando notas (no queda leche, compra más) y por mensajes que en persona últimamente.
