Hollow knight- Deseos cumplidos

Pidiendo deseos

En Boca sucia se estaba celebrando el festival de Tanabata, un festival de amor y deseos. Boca sucia estaba decorada con unas tiras de papel de colores en las que los niños y adultos escriben sus deseos y después se cuelgan en ramas de bambú. A la mañana siguiente los trozos de papel se sueltan en el mar o en los ríos. Para ellos en este caso, tiran su deseos en la Ciudad de las lágrimas, cual sus deseos escritos en esos papeles de colores se cumplirán. Boca sucia dstaba lleno de vida, gente, luces, colores y comida rica. Entre la multitud se encontraba Quirrel, el explorador de Hollownest, Quirrel. Llevando un lindo kimono azul con un obi de color blanco. El explorador iba acompañado por un alta y apuesta criatura, Ghost. Éste llevaba un Hakama con unos colores no tan llamativos pero elegante. La parte superior era de un verde aceituna, acompañado con su delgada chaqueta negra y sus pantalones grises. Los dos estaban pasando un momento agradable juntos observando ese hermoso ambiente, pero el alto interrumpió a Quirrel señalando a uno de los sitios de  venta de dulces, cual estaba lleno de niños y niñas eligiendo y comprando sus dulces. Quirrel lo atendió al momento al ser llamado con un toque en el hombro y observó dónde señalaba el alto.

-Oh, dulces! Te apetece unos cuantos?: Preguntó el bajito, cual éste asintió con entusiasmo.

Los dos se acercaron al puesto, había toda clase de dulces amargos, pika-pika, ácidos, suaves, etc... Quirrel no solía comer muchos dulces así que mirabava uno por uno para ver cuál le apetecería más.  Había mucho barullo en ese puesto de dulces, los niños hablaban alto y reían, colaban sus manos a los dulces selecionando los con ansia. Quirrel no se podía concentrar ni decidirse con tanto ruido y movimiento.

- Madre mía... Oye Ghost, ya has cogido los que querí-....?

Ghost estaba igual que los niños pequeños,  alcanzando los dulces con velocidad y haciendo crecer más su bolsa, cual guardaba allí los dulces que tenía que comprar. Al explorador le caía la gota de sudor al verlo así pero a la vez le parecía muy adorable. Una vez seleccionados los dulces,  pagáron y continuaron su ruta. El alto comía sus dulces ácidos y Quirrel al final se compró una papaleta de strawberry. Ghost le  ofreció uno de sus dulces a Quirrel, cual él acepto , agradeció y se la tomó. La cara de Quirrel se le transformó al sentir como ese sabor tan ácido atacaba a sus pupilas gustativas, eso hizo que Ghost se riese a escondidas girando su rostro al lado contrario del explorador. Quirrel se metió su papaleta para suavizar ese gusto, acto seguido Quirrel le dio un pequeño e inocente codazo a Ghost.

- Que te crees que no te he visto reír? : dijo aun haciendo alguna mueca. El alto se disculpó dándole unos golpecitos en la espalda con cara de felicidad. Ghost se incorporó  cerca del rostro de Quirrel, tomó su mano cual sujetaba la papaleta dentro de su boca aún,  el alto hizo sacarle la papaleta de un leve tirón y se lo llevó a su propia boca. Quirrel al ver esa escena se quedó de piedra. Ghost una vez que degustó la papaleta de su pequeño compañero, se encogió de hombros como señal de insatisfecho y se volvió a incorporar. Dejando a Quirrel sin poder soltar ni una palabra.

Al rato de estar caminando, los dos se sentaron en un banco a ver con calma las decoraciones y a la gente colgar sus deseos con sus seres queridos. Quirrel se sacó el palo de la papaleta ya terminada de la boca y preguntó a Ghost.

-Sabes de dónde viene este festival Ghost? : Cual el alto negó con la cabeza. - Hay una historia de amor y tristeza tras este festival. La fiesta celebra el encuentro entre Orihime  y Hikoboshi. La Vía láctea, un río hecho de estrellas que cruza el cielo, separa a estos amantes, y sólo se les permite verse una vez al año, el séptimo día del séptimo mes lunar del calendario lunisolar. Ya que las estrellas sólo aparecen de noche, la celebración suele ser nocturna. Te lo imaginas? Esperar todo el año para ver a la persona que mas amas en este mundo... que cruel...

Los dos sin expresar nada más siguieron mirando como la gente seguia el festival. Ghost observó a Quirrel, se veía algo serio pero no enfadado. El alto para romper ese silencio entre ambos, metio su mano en el bolsillo y sacó dos papelitos rectangulares con una pluma para escribir. Ofreció tal objetivo a Quirrel.

- Oh vaya! De donde los as sacado? No tenía ni idea de que los habías traído contigo. E-esto, pues quieres que escribamos  nuestros de-deseos? : Preguntó el explorador algo sonrojado. Ghost volvió a sentir con la cabeza. Quedandose con un papel para él y para Quirrel, el alto ofreció a su compañero hamablemente que escribiera él primero su deseo. Ya que solo tenían una pluma: - yo primero? Va-vale hehe, está bien. Veamos...
Quirrel al estar pensando un ratito empezó a escribir su deseo. Le devolvió la pluma a Ghost una vez finalizado su escritura, y se fue a colgar su deseo con el resto de deseos ya colgados en las cañas de bambú . Ghost en menos de 10 segundos ya tenía su deseo escrito, y se acercó a colgar el suyo junto con el de Quirrel. Torpemente, el alto no ató bien el fino hilo al bambú y se cayó al suelo.
-Deja, yo te lo cojo: se ofreció el explorador. Se agachó a coger el papelito de su compañero, y por casualidad cayó con la escritura cara arriba. Eso hizo que Quirrel no pudiera evitar leerlo. Y dice lo siguiente:

"No me aléjese de Quirrel de ningún lado ni de ningún momento, gracias"

Quirrel se incorporó lentamente, empezó a ver las letras borrosas a causa de unas lagrimas traicioneras que salieron sin avisar. Dos pasos oyó en sus espaldas, se giró alzando la vista en busca de la mirada del alto. Ghost, con sus dos manos alcanzó y sujetó el rostro de Quirrel y lo besó profundamente. El explorador aun con el papel en su mano, podía sentir que el unico sonido que podía oir era sus propios latidos llendo a mil por ahora. Su cara ardía y sus ojos seguían derramamdo lagrimas. Ghost se separó de su rostro lentamente y mirandolo a los ojos, pudo ver a su fiel y compañero amigo siguiendo sacando lágrimas sin parar. Quirrel apartó su mirada al suelo, se sentia abochornado. El alto algo disgustado por lo que había provocado tomó su deseo y lo acabo colgando. Pero acto seguido sintió como el pequeño le abrazaba con fuerza y ocultando su rostro entre su traje. Ghost le devolvió ese fuerte abrazo. En ese momento Ghost miró el deseo que había escrito Quirrel. Y decía:

"Compartir amor y acaricias una vez al año es una crueldad... pero recibirlos cada día y no poderlos dar es una maldición. Porfavor ayúdame... y cuida mucho de él. Gracias"

Ghost al leerlo, sin perder un minuto más cogió los dos deseos de nuevo, tomó la mano de Quirrel y se lo llevó lejos de la multitud.