-Es peligroso enamorarte de mí- dijo mientras besaba su cuello y mis manos desabotonaban su blusa.-¿Es peligroso para ti o para mí?- Le pregunté mientras su blusa caía...
-Tendremos que averiguarlo, aunque se pierda el glamour- sonrío- pero no maquillemos esto, sólo no rompamos nada- dijo, mientras sostenía mi rostro entre mis manos, y me beso...
Lentamente subí mis manos por debajo de su falda, sintiendo la suavidad de sus muslos, sus bragas, y de rodillas ante ella, las baje lentamente mirándola a los ojos, sus manos me acercaron a su vientre, la bese subiendo su falda, besando mis sueños de hacerla mía...
...-Es bellísima- pensé, mientras besaba su vientre, mis manos se paseaban por sus caderas, por debajo de su falda, sintiendo su humedad, lamia su vientre, lo besaba mientas subía, bese sus senos aún con el sostén blanco, sus manos en mi nuca me guiaban hasta su cuello...
-¡Dios! ¿Por qué me amenazas?-Le dije mientras pegaba su cuerpo al mío, sentí la firmeza de sus senos en mi pecho, besaba mi cuello, lo lamía; quede quieto pensando en lo que me dijo, ¿por qué las mujeres quieren matarme amándome y abandonándome?...
-¿Por qué guardas silencio? - Escucho tu belleza, que canta en cada curva, en cada comisura, en la suavidad de tu piel de durazno -¿Y qué te dice? - Que Dios existe.
De algún modo terminamos desnudos, ella yacía boca abajo y me miraba como nadie lo había hecho, al menos así, viéndome a los ojos, acarició mi cara tiernamente -¿sabes que voy a irme verdad? - me pregunto y giró su cabeza.-Lo sé, y lo siento- le respondí acariciando su espalda.
-Te amo y sé que me destrozarás el corazón- le dije al oído, abrazándola por la espalda, nuestras miradas se perdieron entre las estrellas -Lo sé, pero no creí que lo tuvieras- me dijo mientas me besaba, un beso que valía la pena que me diera en la madre, siempre, siempre ella.
La bese vorazmente, descargue mis pasiones en su cuerpo, sacié mi sed en su secreto, sin saber, que me había condenado a su eterno recuerdo.
-Miénteme- fue lo único que pude decirle, mientras nuestros cuerpos desnudos conjugaban un sueño, entre besos, caricias y luna por testigo me dijo -Te amo-
A la mañana siguiente, el sol descansaba en mi almohada y mientras la veíamos vestirse, ardíamos por tocarla -¡Deja de verme!- dijo, viéndome por encima de su hombro, ¿por qué la vida me arrebata las cosa bellas?...
Estaba espléndida, me di cuenta donde iniciaba mi problema-Buenos días - le dije, mientras me acercaba a besar sus labios color carmesí, no podía creer que amanecí con ella, eso me aterraba.-Hola!- dijo ella con la sensualidad que la caracteriza, estaba jodido, la bese...
-¿Recuerdas que dije "te quiero"?- le pregunté mientras arreglaba su cabello, y sus profundos ojos me atraparon - Si -me dijo, mientras el rosa se su suéter cubría su desnudez -Lo dije enserio- ella se rió.
-La gente vive de ilusiones- dijo ella.-¿Acaso existe otra cosa?- pregunté.Se ajustó la zapatilla, cerró su blusa y se fue, me quede con la ilusión de que no cruzara esa puerta.
-Tu problema, es que cuándo consigues que te amen, te asustas y te vas.-
- ¡A la mierda con todo! - gritó ella, abalanzándose hacia mí violentamente, me golpeaba, me escupía, me arañaba, y yo no pude hacer otra cosa que amarla.
Todo le quedaba demasiado pequeño, la falda, el sostén, su sueños, mis sueños; el mundo.-te faltan agallas- le dije, mientras salía de la habitación azotando la puerta, azotando el anhelo contra el piso para pasar sobre él clavando sus tacones en el centro del pecho, matándolo.
Estoy tan jodido, como cualquier otro jodido enamorado del mundo.
Camine un par de cuadras hasta el bar de siempre, me senté y como es costumbre apareció un Whiskey puesto con dos hielos, frecuentar un lugar tiene sus ventajas, ojalá así fuera cuando nos soñamos.
Me senté en el sillón, con la tristeza a un lado, le hablé de ti por horas, hasta que la botella se llenó de vacío y nostalgia...Lloró inconsolable toda la noche, sólo pude abrazarla para rompernos.
Hace un par de horas que deje de beber Whiskey, para tomarme los recuerdos de tus labios, de tu piel...Mañana tendré la peor resaca de mi vida.
Permanecí no se cuanto tiempo, retando a la manija a girar, retando al silencio por que esos tacones sonarán otra vez, hasta convertirse en esa sombra que se filtra por debajo de la puerta, trayendo ilusiones...
-Aún te paseas en mi mente, con tu sujetador blanco y tus bragas color rosa- le dije, con la esperanza que escuche sus mensajes, guarde silencio por un rato pensando si debí decir lo mucho que la extraño... - el buzón está lleno- ...Colgué, pensando en no volver a llamar.
Tomaste todo, te llevaste todo. Sólo dejaste al gato que me odia y cada noche nos sentamos juntos y espiamos por ventana esperando tu señal.
Desperté envuelto en un perfume extraño, y la resaca moral de lo que había pasado, ahora me sentía más culpable y más enamorado de ella. -¿tienes una toalla? -gritó desde la regadera una voz desconocida, la dueña del perfume que me llenó de caricias anoche...Decidí báñame.
-¿Qué mierdas me pasa?-pensé mientras besaba su cuello y mis manos se filtraban bajo su falda, pude sentir el encaje de su ropa, su humedad, la besaba obscenamente. Sabia que no debía seguir, pero hacerlo era vengarme de ella, o ella de mi, por que sabe que no dejo de pensarla...
-Deseo tenerte entre mis brazos; entre mis muslos...- me dijo con un erotismo casi demoníaco, sentí su respiración y el silencio no envolvió, me quede sin palabras, sonreí y colgué el teléfono. - ¡Por qué carajo te fuiste! - sé que no me escucho pero sabe que lo pienso.
...se escuchan sus tacones acercarse, su perfume, su sombra se escabulle debajo de la puerta, el angel se aproxima a convertir mi habitación en un infierno, un infierno en el que me quiero consumir...
-¿Aun bebiendo?- me dijo, soltando su bolso sobre el sofá, -Sólo mientras llegabas- sonreí, y di un trago más, sabía que por esa noche, sólo bebería su sexo -Tardaste 3 días en regresar- no podía dejar de ver su sus piernas, como el vestido la ceñía- caminó por la habitación...
Anoche soñé contigo- le dije tomando su cara entre mis manos -Supongo que eso no era parte del plan- me dijo antes de besarla, un beso íntimo, dulce -Creí que lo teníamos prohibido- y me abrazó -¿y qué vas a hacer?-murmuró en mi oido...-Seguiré soñando-.
...sabe que no dejo de verla, de desearla- ¿y en estos días que más haz hecho, además de beber?- me pregunto mientras ponía música- esperarte, e imaginarte desnuda- le dije mientas la abracé por la espalda...
-Lo que me gusta de una mujer, son sus defectos, siempre están llenos de verdad- le dije mientras tomaba sus manos, mirándola a los ojos.- ¿Ah si, y ahora a donde vamos?- me pregunto- ¿vamos para adelante?- dijo, recargándose en mi hombro.-¿Hay otra dirección?- Y la bese.
