Desire: Vidas Ajenas

Parte I, "Abismo labial" - Prólogo

Nos besábamos en todo el apartamento, sudábamos en frío, estábamos haciendo mal, ¿qué quería? ¿qué me hacía feliz? ¿la amaba? Nada me importaba, solo la besaba una y otra vez, con desesperación, sabía que después de esto ya no existiría la redención, era una patética rendición, caía hacia mis impulsos más animales mientras acrecentaba el deseo, sus ojos cristalinos, llenos de lágrimas, me pedían más besos, no sé si nos amábamos, pero sé que nos deseábamos como si todo el puto mundo fuese a desangrarse en una fría mesa en un hospital sucio. Quizá el amor mata, quizá yo no sepa de ángeles, pero conozco el miedo que hace que a las personas les crezcan alas, quizá yo estaba perdido, pero sabía que ambos éramos los pecadores, estábamos solos, completamente desesperados, estábamos perdiendo todo, no nos importaba, seguíamos besándonos como si fuésemos la culminación de todo lo que nos había presionado hasta el punto límite, nos quedaba un poco de alcohol tirado en una mesa, un poco de cigarrillos por el piso, lágrimas en nuestra ropa y almas. Todo mi sentido moral estaba muerto, aquel acto significaba todo un signo de exclamación hacia todos los eventos que nos habían llevado hasta aquel punto, nos comenzamos a desvestir, y todo habría terminado.

Para que todo esto tenga sentido debo regresar siete meses atrás en el tiempo, de vuelta a la noche en la que el dolor se convirtió en locura, obsesión, amor, cuando me perdí para siempre.