Esta es una historia que me sucedió, hoy les vengo hablar sobre un perro que tuve y quiero mucho, bueno espero que les guste.
Todo se remonta hace muchos años cuando tenias más o menos 6 años, mi madre y yo recogimos un perro de la calle era demasiado lindo, ojos de color café y el pelito también era de color café raza criolla. Me acuerdo cuando lo encontramos nos dijeron que el perrito lo llevaban amarrado a un carrito con basura, me dio mucho pesar cuando escuche eso, por eso me prometí que lo cuidaría muy bien.
Lo llevamos a la casa, le dimos comida y agua. Después de un tiempo el ya estaba más familiarizado con nosotros y yo le tenía más cariño
Yo jugaba mucho con él, cuando salía del colegio y llegaba a la casa el salía corriendo para saludarme:3 y empezábamos a jugar, pero como siempre después de hacer mis tareas.
Me gustaba acariciarlo mucho, yo lo volví un poco mimado, pero no lo podía resistir era muy tierno.
Nosotros teníamos una cama y en las esquinas tenía todo mordido por Tony, esos son los recuerdos que nos dejo.
Bueno retomemos, lo estábamos enseñando a que fuera al baño en el patio o cuando lo sacaba a pasear, las personas le empezaban a tomar cariño y como no él era muy lindo aunque nada fuera de lo común pero aun así a mi me parecía muy lindo.
Mi perrito era más amigable que yo :'v pero aun así lo quería.