Doubt [Joshler]

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«Scared of my own image, scared of my own immaturity,
Scared of my own ceiling, scared I'll die of uncertainty.
Don't forget about me,
Even when I doubt you,
I'm no good without you.»

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—¡SABES PERFECTAMENTE QUE ESTOY HASTA LOS COJONES DEL MARICÓN ESTE!— mi padre dió un golpe contra la mesa. No eran ni las 9 de la mañana y ya estaba gritando, como siempre.

—Te recuerdo que sigo aquí.— no sé para qué dije eso si sé que le da igual. Él me miró mal, demasiado mal, la había vuelto a cagar.

—¿Te crees que me importa eso, maricón?— me encogí de hombros y seguí desayunando, sinceramente no tenia ganas de discutir, al menos no ese día.— Te he hecho una pregunta.— su tono empezaba a ser más firme de nuevo.

—Y yo te he contestado con un gesto.— apretó sus puños y me miró aún con más odio, decidí no mirarle y seguir desayunando.

—Ya, cálmate por favor, simplemente te he pedido un favor, no era necesario que te pusieras así.— mi madre se había vuelto a meter a la discusión, menos mal porque si seguía así, mi padre iba a acabar pegándome un puñetazo.

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Para, para, PARA, vamos a hacer un inciso aquí. ¿Qué está pasando? Bueno, es muy sencillo:
Yo, Tyler alias “el maricón” (aunque claro, eso sólo es para mi padre, los amigos de éste, algunas vecinas entrometidas, la gente a la que le caigo mal y si no me equivoco, el hijo de los vecinos) cumplo dos años de relación con el “maricón” de mi novio y vamos a hacer “mariconadas”.
¿Que qué pasa? Mi padre odia a los “maricones” (no entiende que la palabra correcta es gay u homosexual) y mi madre le ha pedido dejar la casa libre para que pueda estar a solas con mi novio.
Ahora sí, continuemos.

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—Ya te he dejado clara la respuesta, si tu hijo quiere traer a su novio a casa, que se independice.— me jodía que pusiera cara de asco al decir "novio".— Yo a su edad ya estaba trabajando y estaba a punto de formar una familia ¿y él? ¿él qué? No hace nada.

—Me alegro de no hacer lo mismo que tú, digo, siempre te estás quejando de mi y diciéndome que soy el mayor error de tu vida entonces no debes de estar muy feliz de haber formado una familia tan pronto ¿No crees?

—No es mi culpa que me haya salido un hijo enfermo.— mi madre resopló.

—Te he dicho miles de veces que no digas eso, Tyler no está enfermo.— mi padre estaba apretando sus puños de nuevo.

—Y yo te he dicho miles de veces que dejes de defenderlo, está enfermo y punto.

—Es más enfermizo pensar que estoy enfermo porque me gustan los chicos a que me gusten los chicos como tal.— se levantó y se acercó a mi, primera bofetada del día.

—No me contestes si no te lo he pedido ¿entendido, maricón? —no respondí. Segunda bofetada del día— Te he hecho una pregunta.

—Sí sí, lo que sea. —me levanté y me fui a mi cuarto.

Cuando subí cerré la puerta y le mandé un mensaje a Josh, mi novio. Últimamente lo he notado un poco raro, noto como si no quisiera hablar conmigo, quiero pensar que simplemente necesita pensar o algo así, solo que duele que no quiera contarme qué pasa, pero confío en él así que no lo voy a agobiar.

Puedo aguantar que no quiera verme/hablarme algún día, pero con esto me parece que se está pasando, igualmente, he dicho que no lo voy a agobiar, supongo que es normal que no quiera estar conmigo siempre.

Intenté no pensar mucho en el tema y pasar todo el día como cualquier otro.

Me duché y volví a tumbarme, me aburría muchísimo así que decidí llamar a Jenna, mi mejor amiga, para que viniera a pasar el rato.

Una hora después Jenna llamó a la puerta, bajé para recibirla y en parte intentar que mi padre no le dijera nada.

—Hola Ty ¿puedo pasar?— Jenna me saludó tan feliz como siempre, no me extraña, no tiene motivos para no estarlo.

—Claro Jen, pasa —le sonreí de vuelta y me aparté para que ella pudiera entrar— Vamos rápido a mi habitación antes de que aparezca el subnormal de mi padre. —empezamos a caminar hacia la habitación pero obviamente tenía que aparecer él, no tengo tan buena suerte.

—Oh, hola Jenna, Tyler no nos avisó de que ibas a venir. —a veces me pregunto si mi padre tiene cerebro y si es así, si está en perfecto estado.

—Hola señor Joseph, bueno, es normal que Tyler no les avisase, en parte fue culpa mía ya que le avisé con muy poca antelación de que iba a venir. —siempre le miente a mi padre intentando que yo no quede como un desastre, es un amor.

—¿Sabes? Tyler estaba mejor cuando estabais juntos él y tú, ahora solo va con chicos. —y de nuevo el tema de que soy gay, siempre absolutamente SIEMPRE que viene Jenna, le tiene que nombrar eso de que fuimos pareja hace años.

—Si es lo que le gusta y le hace feliz, deberíamos aceptarlo, a mi me parece perfecto que sea quien quiere ser —sé cual es la cara que pone mi padre cuando se está enfadando, y era la misma cara que estaba poniendo en ese momento. Simplemente agarré a Jenna del brazo y fuimos a mi habitación.

Estuvimos hablando y viendo vídeos hasta que se hizo la hora de comer, mi madre le pidió que se quedase a comer con nosotros a lo que Jenna aceptó. Pasamos toda la tarde viendo películas, necesitaba distraerme de lo de Josh, el cuál por cierto no había vuelto a hablarme.

Se hizo tarde y Jenna se fue, miré mi móvil esperando un mensaje de Josh, pero nada. Me puse música y le hablé pero no contestó ¿Tan extremadamente ocupado estaba como para no mandarme ni un triste mensaje en casi todo el día?

Empecé a pensar en todo esto ¿Y si Josh ya no me quería? ¿Y si no soy lo suficientemente bueno para él? Digo, es fácil ser mejor que yo y quizás él había conocido a alguien, pero Josh no es así ¿Verdad?
Me estaba deprimiendo yo solo con mis pensamientos, me tapé con la manta hasta la cabeza y me dormí.

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