Confusión

22 4 2
                                    


Explosiones, gritos y demás ruidos por todas partes, el aturdimiento  no me deja ubicar lo que los produce, se escuchan por todos lados; lo único que recuerdo es a mi papá con cara de preocupación y dando todo de él para salvarme; aún no se me olvida su voz diciéndome "¡No salgas, no te asomes, tápate los oídos y, pase lo que pase esfuérzate por mantenerte a salvo, con o sin nosotros!".

No sé exactamente lo que pasa afuera, presiento que es algo sumamente grave y creo con firmeza que no solo es aquí, en mi ciudad, sino en todo el mundo. Desde hace mucho tiempo he escuchado hablar a mi papá con sus amigos y con mi mamá sobre su preocupación por la situación del país, sobre los graves problemas que tiene el mundo, sobre los conflictos de la sociedad, sobre los gobiernos y sus ansias de poder, sobre lo soberbios que son los ricos y sobre que alguien tiene que hacer algo respecto a todo lo que esa pasando.

He analizado la situación y veo que no nos parecemos a lo que habla mi papá, mi mamá y la gente mayor del cómo eran antes los humanos, de lo solidarios que eran, de que la gente se abrazaba, se decía cuánto se querían y ahora... pues en realidad ahora eso ya no existe, los sentimientos ya no importan todos somos como máquinas, como robots de carne y hueso.

Estoy  asustada, angustiada por mi familia,en un rincón de mi casa, en la total obscuridad, solo escucho mucho ruido por todas partes, muchos golpes, muchas explosiones, y nada más. Estoy adolorida, pero tengo que moverme, como dijo mi papá, tengo que ponerme a salvo, aquí estoy expuesta y puedo morir. Bajo lo más rápido que mi cuerpo me lo permite, sé a dónde me dirijo, a pesar de que no puedo ver nada, se que en ese lugar estaré bien pues ahí es al lugar en donde de niña solía jugar con mi hermana a las escondidas, o donde me escondía cuando mis papás me regañaban, logro llegar al sótano, mis ojos se cierran y ya no sé más de mi...

Despierto, no sé qué hora es, no sé en qué día estoy, ya no oigo gritos ni explosiones y menos ese extraño zumbido que en todo momento estaba resaltando por sobre todos los ruidos o al menos eso sentía e mis oídos, creo que todo ha terminado y eso hace que mi corazón se alegre pero se que tengo que hacer algo, debo salir de aquí, debo buscar a mi familia, debo... comer, ¡tengo hambre!, debo salir de mi "escondite favorito". Subo a la primera planta de mi casa y me llena de tristeza ver lo que un día fue el hogar que con tanto amor formaron mis padres, y aunque por dentro lo sabía, duele aceptar la realidad, hay destrucción total en mi casa, busco comida pero no encuentro nada mas que una lata de frijoles, la devoro tan pronto como la logró abrir y salgo a buscar a mis papás, deben estar por algún lado, ¡no se pueden haber ido, no me pudieron haber dejado aquí, sé que mis padres dan todo por mí, deben estar escondidos como yo lo hice!

¡No! Todo está desolado, de mi ciudad no ha quedado nada, carros aplastados por todas partes, cristales rotos, edificios derrumbados y lo único que se mueve es agua podrida, todo está irreconocible, pero... ¡No me puedo dar por vencida, seguiré buscando!, aunque en realidad ya no sé qué es lo que quiero encontrar, quizá solo sobrevivir. De pronto, algo me hace saltar, un ruido en una pila de basura, un ruido que se hace cada vez más notorio, luego veo movimiento y me coloco inmediatamente en guardia, me acerco con cautela un nudo se me forma en la garganta, no tengo ni la menor idea qué es lo que se mueve y cuando menos lo espero algo de la nada salta sobre mí y... ¡Un cachorro!, un asustado y sucio cachorro esta sobre mí, parece como si me conociera de siempre, creo que es porque está en la misma situación que yo y solo esperaba encontrar a alguien, igual hubiese sido quien hubiese sido estaría emocionado aunque no lo parezca no me importa, ahora ya no estoy sola, por un momento pensé que era la única sobreviviente a todo esto, porque a pesar de que duele pensar en eso es lo más probable luego de ver el estado de la ciudad, decido dejar de pensar en eso y lo abrazo con ansias, con desesperación, con gusto, con tristeza, con enojo, con todo y con nada, con todo lo que puedo darle, con todo lo que no puedo darle.

Confusión (Completa)Where stories live. Discover now