Sobrenatural Symphony

Parte 1

—¿Puedes venir conmigo?—Preguntó la chica nueva de nombre Raquel, la chica se había acercado a Sith repentinamente sin ni siquiera presentarse antes, el chico solo conocía su nombre porque momentos antes la profesora la había presentado ante la clase.

La chica se dió la vuelta dando por hecho que Sith la seguiría, su pelo blanco pasó a centímetros de la nariz del chico permitiéndole oler el aroma de lavanda que había impregnado en él.

Raquel llegó sin mirar atrás hasta la zona trasera de la escuela donde nadie los escucharía o molestaría, pero para su sorpresa el chico no la había seguido; indignada la chica volvió al aula, Sith estaba sentado en su sitio tomando notas de lo que decía la profesora; la mujer se calló al escuchar la puerta abrirse, al ver que era Raquel continuó dando clase como si la chica no la estuviera interrumpiendo, tal vez por el hecho de que no le gustaba su trabajo, o porque la mayoría de los alumnos o probablemente todos iban a trabajar en el negocio familiar de sus padres, al principio insistía en que atendieran a sus explicaciones, pero, los alumnos no le hacían caso y algunos hasta faltaban a la escuela para ayudar en casa, poco a poco fue rindiéndose y en esos momentos solo se dedicaba a dar la clase permitiendo a los pocos alumnos que aún se presentaban hacer lo que quisieran.

—No me has seguido—Se quejó Raquel enfadada con Sith.

Sith la miró con preocupación, se estaba preguntando por qué la recién llegada quería con tanto impetú que se saltara la clase y fuera con ella.

—Estamos en clase.

La respuesta del chico no agradó mucho a la chica, pero esta decidió sentarse en un asiento delante de Sith y esperar a que terminara la hora de Lengua, aunque no planeaba prestar atención a la lección de su maestra.

Raquel sacó una libreta y un estuche de su mochila. Arrancó una hoja de papel y cogió del estuche unas tijeras para recortarla en forma de cuadrado; tras plegar los extremos del papel hacia el centro le dió la vuelta y volvió a plegar los extremos hacia el centro, a continuación sacó un boligrafo y comenzó a escribir cosas en el objeto de papel que había hecho y con unos rotuladores lo pintó.

—Dí un número—Pidió al chico con el objeto de papel en los dedos.

El chico le siguió la corriente mientras seguía tomando apuntes. Raquel comenzó a contar moviendo los dedos hasta que llegó al número que Sith le había dicho, en el objeto podían verse cuatro triangulos, azul, rojo, verde y amarillo respectivamente.

—Escoge uno—Pidió la chica a continuación.

—El amarillo.

Raquel miró lo que había escrito en el triangulo amarillo y se lo leyó al chico "Eres guapo" dijo con una sonrisa que sonrojó a Sith.

—¿Qu-Qué ponía en los otros?—Preguntó curioso por saber si ponía lo mismo en todos o había sido coincidencia.

—¿De verdad quieres saberlo?—Preguntó con una expresión seria. Sith tragó saliva, la cara de la chica le había quitado las ganas de saberlo, aunque no entendía bien la razón, Raquel parecía no querer decírselo, a pesar de que había la posibilidad de que Sith hubiera elegido eso que le había cambiado la expresión.

—S-Si, quiero saberlo—Contestó a pesar de estar arrepintiéndose de ello en el mismo momento en el que lo había dicho.

—Está bien, espero que no te arrepientas—Dijo la chica ofreciéndole el objeto de papel para que lo leyera él mismo.

Sith acercó su mano temblorosa a la de la chica para agarrar el papel, Raquel lo miraba con odio, y su mirada se hacía cada vez peor a medida que el chico se acercaba al objeto de papel. Cuando finalmente lo tenía en la mano Raquel lo estaba matando con la mirada. Sith abrió por completo el papel, y entonces vió que lo que había escrito en él eran tonterías del mismo grado que "Eres guapo" incluso había un "Eres feo", pero no comprendía por qué Raquel lo miraba con tanto odio.