Oráculo

La Cámara

Capítulo 1

Tom

Al fin. Por fin. La Cámara Secreta. Cinco años buscándola. Cinco años tras todas las pistas que encontraba. Ninguna lo llevó a ese lugar. No. Fue una ridícula coíncidencia. Escapar de la Ravenclaw Warren. Esa condenada chiquilla parecía tener un radar para encontrarlo. Aunque no sabía el por qué. Debería de haberla maldecido en algún momento. Pero tenía otras cosas en mente.

Ahora estaba aquí. Frente a la puerta de la Cámara de los Secretos. Las serpientes le anunciaba el triunfo. Irónico cómo lo encontró. ¡Por querer refrescarse! Así encontró la señal en un grifo. Aunque eso era relativamente nuevo. Es decir... no pudo ocurrírsele al gran Slytherin poner la marca en un grifo. La cuestión es que allí estaba. Solo debía abrirla y liberar al monstruo que habita allí.

Según la leyenda, el cuento, el chisme, Grinffindor y Slytherin se pelearon por permitir dejar entrar a los nacido muggles o no. Al perder, antes de salir de Hogwarts, Salazar Slytherin creó la Cámara para conservar la bestia y que su descendiente lo liberara para limpiar el colegio de toda sangre sucia.

Y aquí estaba él, el descendiente de Salazar Slytherin a punto de liberar el Basilisco y limpiar Hogwarts para siempre.

-"Abrete"

La emoción revoloteaba en su vientre, pero sostenía firmemente la varita. No porque fuera el descendiente de Slytherin iba a entrar desarmado.

Las serpientes se deslizaron permitiendo que la puerta se abriera. Frente a él se extendía un amplio salón de piedra, al fondo el presumible rostro del gran mago. Columnas mantenían a oscuras unos corredores. Se podía escuchar el sonido de agua goteando en algún lugar. La humedad penetrante en el aire. Caminó por el amplio salón. Sus pasos resonaban en el silencio. Se paró frente al rostro tallado en la piedra del muro principal.

-Aquí estamos, amado fundador. Al fin, limpiaré Hogwarts... como era tu voluntad. "Despierta, Bestia, y cumple con la misión que te han encomendado".

Inmediatamente, la boca de Salazar Slytherin se abrió y...

Nada.

Nada ocurrió.

-"¡Despierta, Basilísco! ¡El descendiente de Salazar Slytherin te lo ordena!"

De entre la sombra... sale un encapuchado.

-"Bienvenido, descendiente. Lamento informarte que el Basilisco está... momentáneamente indispuesto y no podrá salir. Lo siento."

Y sin más, dio media vuelta y se marchó. La boca de la estatua se cerró, mientras que la de Tom estaba completamente abierta.

-"Pero... ¡¿Qué mierda?!"

¡Volví!

Sí, después de ¡un año! (o más) he decidido volver. Y aquí les traigo un fanfic. Es el primero que publico y me gustaría que le dieran una oportunidad.

Bueno, he aquí el primer capítulo. Corto, pero conciso. No se preocupen... lo tengo terminado.