Siempre te amaré

Parte 1 Sin Título

Ya es tarde, maldita sea ¿cómo se me hizo tan tarde? Se suponía que tenía que llegar a mi departamento hace 2 horas, pero no, el maldito de mi jefe tuvo que tenerme trabajando "horas extras" y seguro no me va a dar ni un centavo más; desde que me independice llego a las justas a fin de mes y no puedo renunciar porque es el único trabajo que se adecua a mi horario, pero claro Ricardo, mi gruñón jefe, se aprovecha de eso y no se cansa de hacerme trabajar horas extras, con la excusa de que soy muy lenta, lo cual es completamente falso. Mis padres me regalaron el departamento en donde vivo actualmente y le agradezco infinitamente que lo hicieran, pero a veces es muy difícil pagar todas mis cuentas sola.

-¡Genial!- digo cansada, no pasara ni un solo auto a estas horas- enserio no pudieron conseguirme un departamento no sé, más céntrico- digo cansada, estoy completamente exhausta, no tengo ni idea de cómo llegaré a casa, los taxis me iban a cobrar demasiado, no pasaba ningún colectivo, y el autobús ya no pasaba, simplemente genial.

-¿Beatriz? - llaman desde la acera de mi costado

Volteo por acto reflejo al no reconocer la voz de la persona que me llama desde un auto negro con ojos inquisidores, por un momento no logro reconocerlo y pienso que se han equivocado de persona, pero luego entro en cuenta, es Ethan.

No le respondo y lo observo, estaba en traje, su cabello marrón estaba perfectamente desordenado, y unos muy grandes ojos verdes me observaban con una mezcla de asombro y expectativa.

-Beatriz, ¿podemos hablar?- me dice, algo nervioso, pero su voz era fría.

- ¿Disculpa? - le respondo extrañada ni una sola vez hemos hablado, al menos no en muchos años.

-Beatriz- me dice y baja a obstaculizar mi paso; quiero seguir mi camino pero el hombre frente a mí no me deja lo observo; lleva puesto un traje, y sus ojos verdes me escanean el cuerpo.

-Que quieres- le digo a esa persona a la cual no le dirigía la palabra desde hace 10 años .

-Debemos hablar Bea- esto último hace que me tense, me fastidia que me llame con tanta familiaridad, y que me digan Bea me hace sentir ¿intranquila?, simplemente no me gusta.

-No, no debemos, no te conozco.

-Somos amigos.

-No, no lo somos, no he hablado contigo por 10 años.

-Deja de ser ridícula, tenía 12 años- me replica el ojiverde.

-Ja! ¿Que no sea ridícula? - le replico cansada de este espectáculo incoherente- y yo 8, no tengo que dirigirte la palabra para mi eres una persona extraña, solo quedan fotos, y ¡maldita sea no te recuerdo!- sí, no lo recordaba, era un vecino y supuestamente mejor amigo, pero no lo recordaba, tuve un accidente el día de mi cumpleaños número 9 y a pesar que los doctores dijeron que no era nada grave me olvide completamente de Ethan

-por favor Beatriz, necesitamos hablar.

-Adiós-dicho esto camine lo más rápido que pude, y tome un taxi, ya no me importaba gastar más de la cuenta, encontrarme con él me había puesto muy nerviosa, su sola presencia me puso intranquila, no lo he visto por nueve años, y no hablábamos hace diez, no sé por qué hablar o pensar en él me hace sentir tan mal.

Llegue a casa veinte minutos después, puse a cargar mi celular, necesitaba hacer una llamada urgente. Me bañe, me puse mi pijama, ya eran la 1:00 am, no creo que Hillary este durmiendo, pensé, ella era una amiga de mi infancia, siempre ha sido muy amable conmigo y es la única que podría tranquilizarme en estos momentos.

Al segundo timbre de llamada Hillary contestó.

-¿Beatriz? ¡¡que sorpresa!!-dijo Hillary muy fuerte, estaba en una fiesta.