AU Fantasia.

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Hace tiempo existio un reino llamado Vongola. En ese lugar estaba a punto de suceder algo esperado por todos, la coronacion del decimo rey: Tsunayoshi Sawada.

La historia del decimo rey seria algo que seria contada por años y años, pues, era un tanto... Peculiar.

Siendo conocido como el inutil de reino desde que comenzo a caminar, su vida cambio cuando conocio a aquel que le cambiaria la vida: Renato di Arcobaleno, mejor conocido como Reborn el sicario/hechicero del mundo. Resulta que dicha persona habia sido encargada de convertir a Tsuna en un buen heredero para el trono y con ello, la vida del joven Sawada cambio para siempre.

Desde el inico las cosas habian sido locas y peligrosas, pero el joven heredero no estuvo solo pues en el trayecto se hizo de amigos que se convirtieron en sus guardianes, aliados, pero sobre todo, que se convirtieron en su familia.

Con su tutor, las cosas tambien cambiaron...

El hechicero era un sadico total con el chico en sus entrenamientos y lecciones, pero cuando el joven necesitaba de su ayuda, este se la daba sin dudar ademas de que su caracter cambiaba un poco al estar a lado del castaño, se volvia ( Segun palabras de sus colegas ), mas suave.

Tsuna sin darse cuenta comenzo a tenerle cariño al sicario, pero nunca quiso decir algo, con que el hechicero se mantaviera a su lado, era suficiente para el.

En el día de su coronacion, el joven heredero solo tenia una duda...

-¿Donde se encuentra Reborn? - Pregunto Tsuna a aquellos que tomaria el lugar de su mano derecha y su mano izquierda.

Hayato Gokudera y Takeshi Yamamoto, respectivamente, solo se miraron entre ellos pues no era la primera vez en la semana que su amigo hacia esa pregunta, lo malo es que seguia siendo la misma respuesta.

- No lo sabemos Decimo - Dio la respuesta Hayato.

Tsuna solo pudo suspirar frente al espejo y luego miro a sus amigos con una pequeña sonrisa.

- Esta bien chicos y Hayato, ya te dije que no me llames Decimo, ni nada relacionado - Dijo el castaño.

Sus amigos solo pudieron sonreir  tambien pero ambos sabian que la extraña desaparicion del hechicero afectaba mas a su amigo de lo que este dejaba ver, mejor dicho, todos lo sabian.

Una vez que el castaño estuvo listo, salieron de su habitacion y fueron a la puerta por donde el castaño entraria a la habitacion donde se estaba haciendo la ceremonia de coronacion.

Por lo que el chico sabia, el lugar estaba lleno de gente. El entraria con sus guardianes y bajaria una escalera para quedar justo en frente del Noveno rey, ademas de quedar en medio de sus guardianes para asi al fin ser nombrado el Decimo rey del rieno de Vongola.

Tsunayoshi solo deseaba que Reborn estuviera ahi, pero al parecer eso no se podria.

No tardaron en llegar al lugar, donde se encontraron a dos personas que no deberian estar ahi, otros dos guardianes de Tsuna: Mukuro Rokuro y Chrome Dokuro.

- Hola chicos - Saludo Tsuna un tanto extrañado ya que ellos deberian estar en su lugat en la habitacion.

- Kufufufu Tsunayoshi - Saludo la piña a su manera.

- Su alteza - Saludo Chrome timida, Tsuna solo suspiro, aun no lograba que la chica lo llamara por si nombre.

- ¿Que hacen aqui? - Pregunto curioso Takeshi.

- Hay un cambio de ultimo minuto - Informo Mukuro como si no fuera nada grave.

- ¿Cambio de ultimo minuto? ¿¡De que  rayos estas hablando cabeza de piña!? - Pregunto/Grito Hayato sin poder creer lo que oia.

Chrome al ver que Mukuro comenzaba a sacar su arma para pelear por el apodo decidio contestar, nadie queria una guerra en ese momento.

- Por orden del noveno, ninguno de nosotros acompañara a su alteza a la sala, todos los guardianes debemos estar en nuetro lugar designado antes que el entre - Contesto la chica, colocandose frente a Mukuro.

- ¿Tsuna debe entrar solo? - Pregunto extrañado Takeshi.

Chrome solo asintio con la cabeza.

Esto era raro, pero no habia nada que hacer, era una orden del Noveno y no la podian desobedeser, aunque no les gustara.

- Esta bien, nos vemos ahi Tsuna - Se despidio Takeshi, alejandose con Mukuro y Chrome.

- Descuide Decimo ¡Le aseguro que todo saldra bien! - Grito Hayato para despues alcanzar a los otros tres.

Tsuna al ver a sus amigos alejarse confirmo que lo que sucedia era extraño, ojala su abuelo le explicara despues el porque de ese cambio. Espero hasta que ya no pudiera ver a sus guardianes y dio un poco de tiempo para que pudiera entrar al lugar, una vez que considero que ya era hora, entro a la habitacion, siendo recibido por trompetas.

- ¡Entra el heredero al trono, su alteza, Tsunayoshi Sawada! - Se oyo el grito del presentador.

Tsuna observo a toda la gente en el lugar, pudo ver a sus padres cerca de su abuelo y sus amigos pero por alguna razon todos ellos tenian una expresion de sorpresa, emocion y alivio en su rostro, se preguntaba el porque hasta que oyo algo...

- ¡Acompañandolo, el mejor sicario y hechicero del mundo, Reborn! -

Ni terminando de oir las palabras Tsuna sintio una mano en su espalda y una calido aliento en su oido hizo que su piel se herizara.

- Es hora Dame-Tsuna... -

Girando rapidamente, el castaño se topo con esos ojos de color ceniza que tanto le gustaban y sin pensar en las consecuencias, abrazo al hombre que tanto habia extrañado en la semana.

Reborn solo pudo sonreir al tener al chico en sus brazos, le fastidiaba el hecho de no haber estado en una semana, pero al final habia valido la pena. Obligando a separarse del chico, saco una cajita larga de su bolsillo, dejandola en la mano de Tsuna que solo lo observo un tanto confundido antes de abrir lo que se le habia sido entregado.

Resultando ser una hermosa cadena de oro blanco que tenia una piedra color ambar de colgante, alredor de esta piedra, habia unas mas pequeñas de color rojo, azul, verde, amarillo, indigo y morado. Si los estudios de Tsuna no le fallaban esas piedras eran aquellas denominadas "Del cielo", pues se decia que de ahi venian ademas de que estas se encontraban en un lugar peligroso y lejano, lo que significaba...

- ¿Tu...? - El castaño no pudo terminar su pregunta pues el sicario tomo el obsequio y se lo coloco al chico.

- Solo lo mejor para el nuevo rey - Fue la respuesta del sicario con una pequeña sonrisa.

- Gracias - Dijo Tsuna, tocando con cariño el regalo.

- Hay que seguir Tsuna, ya dejaste esperando mucho a toda esta gente - Comento Reborn, parandose a lado del chico y ofreciendole su brazo.

- Tienes razon, hay que continuar - Repondio Tsuna con una hermosa sonrisa, aceptando el brazo del hechicero y comenzando a bajar las escaleras.

Todos observaban aquella escena con alegria, los guardianes de Tsuna estaban aliviados, pues, la sonrisa de su amigo estaba llena de alegria; esto explicaba la orden del Noveno.

Al llegar frente al actual rey, Reborn permanecio atras de Tsuna, cosa que alegro al chico y le dio la confianza necesaria para seguir adelante. No importaba que era lo que sucediera en el futuro, siempre y cuando estuviera Reborn junto a el, todo estaria bien.

Incluso si aun no entendia el porque su corazon latia demasiado a lado del sicario, esperaba saberlo pronto...

- ¡Larga vida el decimo rey Tsunayoshi Sawada! -

- ¡Larga vida el rey! -

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¡Iniciamos la semana R27!

Ojala les haya gustado, lamento los errores ortograficos y que sea tan corto, voy con prisa ademas de que no se me ocurria nada XD




¡Historias a través del tiempo, de los mundos y de los universos!Where stories live. Discover now