Capitulo 1.

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    John.

No sentía ninguna sensación de temor en mi cuerpo, caminaba con firmeza y lleno de decisión, esta vez nadie lo detendría. Miré la hora, no faltaba mucho para que el Sr. Charlie Jackson saliera de su despacho, agradecí al cielo por tan fría noche, puesto que no había ni un rastro de personas por esa zona, me escondí tras el callejón de la esquina esperando a que su presa saliera. Sería más que perfecto.
Recordé la noche del jueves de la semana pasada con el ceño fruncido, si ese maldito guardia no lo hubiera detenido, preguntando:
"-¿Qué hace circulando a estas horas de la noche en este lugar, señor?-"De inmediato saque una excusa tonta para huir de ahí, no quería ser motivos de sospechas y mucho menos que descubrieran lo que estaba planeando. Las palabras del guardia fueron definitivas para no seguir con su cometido, estaba desesperado, pero no era un idiota, tenía que planearlo todo con precisión, paso a paso. Sonreí con malicia mientras observaba la puerta, contando los segundos, me sobresalte al escuchar la puerta abriendo paso a un hombre con un gran bléiser negro y sombrero, de inmediato surgió en mi interior un odio prepotente que cada vez se hacía más fuerte, froté la capa de sudor de mi frente que se había acumulado, pronto suspiré observando la neblina que salía de mi boca del frió tan intenso. A pasos lentos me acerque por detrás , observando su silueta, Charlie andaba sin prisa, buscando entre sus bolsillos las llaves de su automóvil, apreté la pistola de calibre 9mm que yacía en el bolsillo de mi suéter, sacándola y sin temor apunte a su cabeza,  me tomo una milésima de segundo el quitarle el seguro. Charlie se sobresaltó, y rápidamente se giró a mirar que es lo que había escuchado.

-¿Eres John? –al reconocerme sus ojos se tornaron aún mas grandes de lo que ya estaban, puso sus manos enfrente de su pecho con las palmas hacía afuera. "Como si eso fuera a evitar el futuro que se le avecina" Pensé y sin darme cuenta solté inesperadamente una carcajada estruendosa.

-Nos vemos en el infierno, idiota.- Solté de manera perversa y decisiva, al tiempo que accionaba con mi dedo anular el gatillo abriendo paso a las balas, el estruendo de los disparos me causo una sordera temporal, las balas entraban en el cuerpo de Charlie, como si de un muñeco de trapo se tratase, debía admitir que la imagen era bastante satisfactoria. Era un loco de remate. Cuando el tiroteo seso, me acerque a el cuerpo inerte de Charlie para asegurarme de que su trabajo fuera eficiente, efectivamente lo fue.
Solté de nuevo un suspiro de alivio y sonreí para mí mismo. Puse el seguro a la pistola y la guarde de nuevo en el bolsillo, podía sentir lo caliente que esta estaba, pero no me importo, tenía que huir. Cuando estaba dispuesto a caminar en otra dirección, escuche un sollozo, seguido de un llanto atormentador, estaba osado a mirar de donde provenía los gritos, pero por prevención saque de nuevo la pistola, gire sobre mí mismo rápidamente apuntando al extraño. Estaba en la puerta del despacho, llorando desesperadamente, mi corazón dio un vuelco y todo mi cuerpo empezó a expulsar fluidos de sudor, baje lentamente la mirada de la pistola.

Mi niño, era él, mi hijo... era mi Julian.

Poco le importaba el sonido de las sirenas acercándose, todo se había ido al carajo, su propio hijo vio el asesinato de su padrastro Charlie, y la peor parte es que fue asesinado por su padre biológico, pero él ni siquiera lo sabía. Mi cuerpo estaba paralizado sin saber cómo reaccionar, solo mire al chico que se acercaba a abrazar a su padrastro, gritando y llorando.

-Maldición.-murmuré entre dientes.

El niño no tenía rastro de temor frente a mí, parecía como si para él hubiera desaparecido. Pero tal vez si lo hice, simbólicamente había desaparecido hasta para mí. Mi vida había sido un declive sin fin desde que lo perdí todo.

Yo era el administrador de la empresa Maserati, una de las empresas más reconocidas de autos deportivos, no podía quejarme, de hecho no lo hacía, todos los días eran vacaciones para mí, con solo 22 años era la sensación de Liverpool, y no había ni una sola persona que no quería entablar una relación social conmigo. Una tarde, como cualquier otra visite uno de esos tantos orfanatos de Inglaterra al que mi tio George tanto me obligaba ir para entregar donaciones y así ganar una "mejor imagen", y era por lo único que iba a esos lugares, porque ¡vaya que me importaba un carajo ser solidario!
Fue una vez, que la vi en el orfanato Straberry Fields, se meneaba de un lado a otro, tratando de bailar con un niño que tenía una enfermedad en la piel, pensé que en la vida volvería a ver algo más enternecedor que ese panorama. Lo que venía después es prácticamente yo rogándole a esa chica que saliera conmigo y ella siempre me rechazaba. Eso, sin duda fue lo que me hizo caer perdidamente enamorado, nunca nadie se resiste a este encanto. ¡Por Dios! ¡Soy John Lennon!
Fue un gran reto, pero al final lo conseguí, me case con la mujer más perfecta del mundo, mi esposa Cynthia Powell.
Al mes de casarnos, ella anuncio que estaba embarazada. Supuse de inmediato que lo nombraría Julian en honor a mi madre, estaba tan emocionado que en ese momento no note lo distante que Cynthia se había vuelto conmigo.
No paso mucho tiempo para saber de qué se trataba, me engañaba, a pesar de que ella siempre me recriminaba por ser un patán con las mujeres, yo nunca le hice infiel, pero ella lo hizo.
Al final hizo lo que tanto criticaba.
Eso fue la gota que derramo el vaso, me volví agresivamente posesivo y celoso, tanto así que de vez en cuando la maltrataba psicológica y verbalmente, pero nunca llegue a tocarla. Siempre en las noches me lamentaba, pero ya no había vuelta atrás, ya nadie ni nada podría cambiar el monstruo que yo mismo cree.
Es imposible pelearse con uno mismo ¿Quién se supone que va a ganar?
Cynthia pronto huyó con un Julian de 6 meses de edad.
Lo único a lo que me dedique desde ese día fue buscar al responsable de mi miseria, pronto me enteré de que Cynthia y Julian vivían con el hombre por el cual me había dejado, contrate un detective privado para buscar por cielo y tierra a ese maldito infeliz y cualquier información importante.
¡Charlie Jackson! Me las pagaras.
Me costó 1 año tener la valentía de acabar lo que había empezado.
Y ese magnifico día por fin llegaría.

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Hola chicos y chicas, me presento, mi nombre es Mariana, y espero que apoyen esta fanfic, antes escribía sobre Larry Stylinson, pero se me olvido la contraseña de la cuenta uwu. Ahora shippeo con locura McLennon (Paul McCartney es lo más hermoso del mundo ¿ah que si?)
Espero por lo menos llegar a los 10 votos para seguir publicando. ¡Apoyen chicas!

Besitos x.

Hazel. -McLennonWhere stories live. Discover now