Perfecto Mentiroso (EN EDICIÓN)

CAPÍTULO 4 +

KATHERINE

Por fin había llegado el esperado viernes esta semana había sido muy agotadora, la escuela había sido súper estresante no veía la hora de salir de aquí, odio este lugar. Estoy cansada el profesor no dejaba de hablar y hablar y sólo veía el reloj esperando la hora de salida. Pero este parecía que se había detenido completamente. Mientras yo no sabía en que mantenerme ocupada para pasar el tiempo Lindsay estaba muy ocupada enviando mensajes toda embobada sin dejar de sonreír. Arranqué un pedazo de hoja de mi cuaderno y comencé a escribirle.

"Deja el celular, te van a descubrir"

Lo doble y sin que se dieran cuenta se lo pase, ella rápidamente lo abrió y lo leyó. Al instante volteó a verme y sonrió sacó algo con qué anotar y empezó a escribirme de vuelta. Unos segundos después me paso el papel de nuevo cuando lo abrí decía

" Esperó que no tengas planes ya que nos quedaremos a ver el juego" :)

Terminó la clase y rápidamente Lindsay se acercó a mí lugar mientras guardaba mis cosas ella no dejaba de mirarme y no quitaba su estúpida sonrisa. Eso siempre lo hace cuándo quiere que haga algo que ella quiere es su forma tonta de chantajearme.

Cierro mi mochila y volteo a verla con los brazos cruzados—¿Qué pasa?

Vuelve a sonreírme—Nos quedaremos al juego verdad—me mira impaciente—Dice que sí y hare lo que tú quieras.

Entrecierro los ojos—Desde cuándo tienes interés en el juego—pongo mis manos en la cintura—Que yo recuerde ni te gusta ni sabes nada sobre el juego.

—Me interesa desde hoy hay algo de malo—se cruza de brazos haciéndose la ofendida—Por favor, por favor.

—No sé—me levanto y empiezo a caminar hacia la puerta.

De pronto empieza a sonar mi teléfono, lo sacó rápidamente del bolsillo de mi pantalón y veo que es una llamada de un número desconocido sin mucho pensarlo contestó.

—¿Hola?

—Hola Kath soy yo, Jacob.

¡Madre mía! en definitiva esperaba cualquier otra cosa, pero no que fuera Jacob el que estuviera del otro lado.

—Hola Jacob—intentó ocultar mi nerviosismo, aunque estaba fallando vilmente, —A qué se debe tu llamada.

Suspira—Supongo que aún estás en la escuela ¿verdad? —pregunta.

—Sí, aún sigo aquí.

Se aclara la garganta—Nathan y yo queríamos invitarlas a ver el juego, claro si no tienen planes.

—No tengo planes y encantada me quedaré a ver el juego—Le contesto enseguida.

Al instante Lindsay suelta un grito de emoción y enseguida volteo a verla asustada.

—Perfecto entonces nos vemos en un rato.

No sé cómo, pero podía jurar que estaba sonriendo al otro lado.

—Sí, muchas gracias por la invitación. –Sonrió.

—De nada, Kath.

—Adiós Jacob—cuelgo.

Rápidamente Lindsay se acerca a mí y me abraza en repetidas veces fuertemente.

—Si no hubiera sido por la llamada de Jacob no hubieras aceptado—me da un empujón sonriendo—Es más que evidente que te gusta y no lo niegues.