No espere tenerte •| Chanbaek |•

Parte uno

Junmyeon me había llamado hace una semana para regresar con urgencia a Corea y lo hubiera ignorado de no ser porque me dijo que mi hermana había muerto, ese era el motivo que me había movido y por el que me encontraba en su casa esperando a que la última persona a la que Yoora vio y dejo a sus hijos para que me los entregaran apareciera.

Pasaron unos minutos cuando sonó el timbre de la casa y el olor por el que hace años me aleje golpeará de nuevo y con fuerza mi olfato, seguido por la imagen de un bello muchacho con tres cachorros puma pardo y Junmyeon.

- Baek, él es Park Chanyeol el hermano de Yoora. Chanyeol, él es Byun Baekhyun - habló mi amigo haciendo las respectivas presentaciones y poniéndose entre los dos.

No sabía cómo reaccionar, mi mente estaba en blanco hasta que decidí dar el primer paso.

- Un gusto Byun Baekhyun - dije extendiéndole la mano.

- Un gusto Park Chanyeol - respondió tomando mi mano y todo impulso contenido desde que estuvo en la sala estallo en una corriente eléctrica que no pasó desapercibida por Junmyeon que decidió dejarnos solos llevándose a los cachorros.

Apenas desapareció de mi vista jale a Baekhyun para besarlo con toda intensidad retenida por años.

- Esos cachorros son míos y tú también - dije casi, casi gruñendo antes de volver a besarlo.

Cuatro años atrás

Me encontraba en casa alistándome para acompañar a Yoora a la reunión de uno de sus compañeros de clase, siendo mayor que ella por un par de años estaba decidido a cuidarla aunque ello implicara conocer a sus amigos, no es que no me agradaran era solo que yo no era una persona muy social y mucho menos desde que a mis dieciocho años tuve conocimiento plena de que todas las leyes de los híbridos no se aplicaba a mí por ser un puma pardo, de eso ya hace dos años y había asimilado la noticia lo mejor que podía sobre todo porque antes de ello yo creía en la ley más mágica de todas, la de las parejas destinadas.

La reunión se iba a llevar a cabo en casa de Lay, un amigo de Yoora que había conocido hace muchos años, nos llevábamos muy bien pero nos tratábamos muy poco en especial desde que comencé a estudiar y trabajar en la empresa de un familiar chino que tenía, pero a pesar de la distancia él como la persona alegre que era estaba emocionado de volver a verme.

Una vez que estuvimos listos nos dirigimos a la casa de Lay donde encontramos un ambiente muy agradable y tranquilo, muchas personas saludaron a mi hermana mientras yo me alejaba a la cocina para buscar un refresco y de paso encontrar a mi amigo, iba caminando un poco distraído cuando choque con una persona más baja que yo y al reconocerlo mis ojos quedaron tan abiertos que en lugar de ser un híbrido puma pardo hubiera sido un búho.

Suho.

Mi amigo y confidente de escuela estaba en la dichosa reunión por lo que no pude evitar reír suavemente mientras me abrazaba.

- ¡Yeol! ¿Cómo estas? Ha pasado tanto tiempo -y yo asentí a sus palabras.

- Mucho tiempo -le respondí riéndome- Vamos por un refresco a la cocina -le dije mientras caminaba hacia allá y el me seguía.

- ¿De dónde conoces a Yixing? -le pregunte una vez allí entregándole uno de los refrescos que tome del refrigerador.

Observe a mi amigo ruborizarse lo que ya de por si era rara, Kim Junmyeon era de las personas más serias y rectas que había conocido un rubor en él era extremadamente raro.

Estaba tan inmerso en la reacción de mi viejo amigo que no me di cuenta al momento en que Lay se llegó a la cocina y se quedó mirándonos de manera sospechosa, aun así no nos dijo nada y se retiró dejándonos solos.

- ¿Y bien Suho? -le pregunte a mi amigo

Un suspiro salió de sus labios antes de que el pudiera responderme -Lay es mi pareja.

Su respuesta me sorprendió pero aun así había algo en la manera en como lo había dicho que me hizo dudar por lo que me atreví a preguntar- ¿Te refieres a Lay como pareja porque son novios o...?- lo mire esperando que el comprendiera lo que quería decir.

Mi amigo sonrió antes de responder negando- No Yeol, no me refiero a él como pareja porque sea mi novio, aunque lo es pero también es mi pareja destinada.

No reaccione inmediatamente, estaba sorprendido nadie había declarado aun abiertamente que dos personas del mismo sexo pudieran ser pareja destinada pero aquí estaba amigo diciéndome que era verdad, me sentía feliz por el pero a la vez le tenía envidia puesto que él había encontrado algo que yo nunca tendría.

Le sonreí ligeramente dándole una palmada en el hombro y susurrándole un "estoy feliz por ti" antes de retirar al jardín de la casa de Lay, no iba a arruinar la buena noticia que él me había dado con mis problemas, bueno más que problemas con mi realidad.

Tenía muchas ganas de llorar, sentía mi pecho comprimirse puesto que sabía que debía acostumbrarme a observar a mis amigos encontrar su felicidad mientras que yo nunca podría tener una igual. Estaba en la parte más alejada y tranquila del jardín, escondido de la vista de muchos cuando escuche la voz de Yoora llamarme:- ¡Chanyeol! ¡Chanyeol! ¡Chanyeol!

Probablemente mi hermana estaría preocupa de no encontrarme por lo que decidí calmarme para ir a su encuentro pero al dar un paso escuche una voz junto a la de ella que me detuvo por completo:- De seguro está adentro Yoora, vamos Lay dijo que lo vio por la cocina.

Aspire profundamente cuando escuche a mi hermana darle la razón al desconocido, desconocido que tenía un olor bastante peculiar como híbrido podría decir que era un puma pero había algo más en el algo que agitaba mi interior.

NO. NO. NO.

Simplemente no podía ser lo que estaba pensando, el estúpido animal dentro de mí debía estar equivocándose y haciéndome pasar una broma cruel.

Le envié un mensaje a Junmyeon diciéndole donde me encontraba que viniera a verme y pidiéndole por favor que no le dijera nada a Yoora, y rogando que viera el mensaje antes de que mi hermana lo encontrará.

Habían pasado alrededor de diez minutos cuando siento a alguien acercarse, me pongo tenso al instante pero una vez que divise que era Suho me relaje. Mi amigo me miro interrogante y como años antes en la escuela se sentó conmigo en el césped y escucho atentamente todo lo que le tenía para contar desde mi fatídica noticia hasta lo que había sentido al captar el olor de aquel chico que había estado con Yoora.

- Creo que es tu pareja destinada -me dijo pero yo negaba, aquello era imposible y yo lo sabía.

-No lo es, solo es una confusión -le respondí.

Mi amigo no cambio de parecer, por el contrario me recomendó hablar con el chico y ver que sucedía pero yo tenía mucho miedo por lo que le pedí que me ayudara a salir de la casa de Lay sin ser visto y llevara a mi hermana a casa así yo podría pensar las cosas de manera que pudiera tomar una decisión.

Cuando Yoora llego me pregunto si estaba bien, lamentablemente siendo mi hermana y habiendo tenido por lo menos un par de horas para pensar no podía mentirle, le dije que no me encontraba bien y que en una semana viajaría a estados unidos para continuar con mis estudios mientras ella iba con sus padres a Perú. Ella me miro dolida y preocupada, yo sabía que no quería dejar corea pero no había otra opción, no podía quedarme, no mientras el animal que vivía dentro de mi pensara que aquel chico era mi pareja.

Yo debía irme lo más lejos posible, lo máspronto posible.