De puentes y casualidades

Lágrimas

Todo comenzó demasiado bien, pensó Jimin cuando ahora mientras enterraba sus dedos en su cabello. El viento le acariciaba el rostro, y brillaban demasiado fuerte las estrellas... para su gusto. 

Sus pies tocaban el vacío. 

Pero a pesar de que estaba ahí sentado nadie se había acercado a él. Pensarían que era un loco más , no importaba se dijo a sí mismo tratando de autoconvencerse,  por las manos corría un pequeño hilo de sangre que llegaba a su dedo y no intentó sacarlo, simplemente lo miró con una fascinación que parecía estúpida. Rememoró el momento en que la navaja se había hundido en su piel blanca, para desaparecer un momento y luego el líquido deseado había caído, el dolor que tanto había esperado.  

Dolor, pero no pudo sacar ni una lágrima. Se sentía roto.  Como que se había descompuesto por dentro y su fuente de lagrimas se hubiera secado para siempre. Miró los cortes verticales que aun ardían pero que no habían logrado calmarlo esta vez.  Hoy parecía que nada servía. La botella de  vodka que guardaba en la habitación había bajado durante toda la noche, pero a esa hora no podía conseguir más y no había ningún efecto. Le dolía tanto el corazón pero simplemente parecía una muñeca rota, ni siquiera quería pensar en el pero le dolía físicamente la ausencia de... no pudo pensar en su nombre. 

Él había sido el hombre, sabía que no debería haberlo amado tan rápido pero era un estúpido. Él era encantador, le había dado todos los memes y lo había hecho escuchar todas las canciones perfectas, con sus dedos encantadores sobre el piano y su voz ronca llamando al oído "Jimin". 

Sabía que hacer, y nunca le prometió nada, solo lo llevó a casa y le susurró al oído: "Quiero conocerte" aunque sabía que no habrían palabras sino que pronto estarían sin ropa tirados en la cama y él se reía sin parar de un vídeo que veía. Luego fue desnudarlo, recorrer entre sus dedos su cabellos y llevarlo al clímax entre feroces embestidas, de haberlo besado como si fuera la cosa más preciosa que pudiera ocurrir en su vida. Lo hizo sentir especial mientras recorría con sus dedos sus huesos delgados...

Aunque ahora se riera como si no recordara nada, pero todo pareció más especial cuando fue por una botella con agua y unos trozos de pizza, le pareció el hombre más atento del mundo... pero solo salieron juntos una vez. El resto era estar juntos haciéndolo en su habitación y comer algo juntos. Ojalá comida italiana y sus dedos recorriendo el piano después de que tenían sexo juntos. 

Ahora mientras sus pies colgaban junto al sonido de  los autos que pasaban detrás de él. Miró la superficie lejana del agua donde parecía que los recuerdos se diluirían si podía hacer que su cuerpo se fundiera en ella... 

Pero él seguía apareciendo en sus pensamientos, era alguien más bien introvertido, pero eso nunca le había molestado no le gustaba toda la gente, pero amaba con locura a quienes le demostraban tan solo un poco de amor, y cuando le contó su historia... no lo odió sino que tomó su cabeza y la atrajo a su pecho besando su cabello y le pareció que iban a ser felices. 

Pero...  como siempre el universo no era un lugar que regalara demasiados momentos felices. 

Los primeros día sin él...No son un buen recuerdo. 

 Simplemente había mirando videos de un Youtuber hasta que sus ojos le parecían reventar. No podía dejar de mirar, porque no podía llorar. 

Aunque mirará sus animes preferidos y las películas que le gustaban. No corría ni una sola lágrima, lo único que quería después de 3 días era llorar.

 Así que tomó la navaja. 

Al 5° día no había ido a la universidad y tenía varias llamadas de algunos amigos, así que simplemente esa noche decidió beberse hasta  la última gota de vodka que quedaba en su botella y sin nada encima solo una camiseta blanca y un jeans fue a dar un paseo.

Eran como las 4 o 5, no sabía la hora pero no habían muchos autos así que caminó por en medio de las calles con el secreto deseo que alguien no lo viera, pero no sucedió.

 Los recuerdos seguían atormentado su pobre cabeza. Especialmente la última vez que lo vió, cuando le dijo que aun no podía olvidar a su ex novio... que eran demasiado diferentes. Que no quería herirlo... Soltó una carcajada sin risa, herirlo fue lo que hizo la primera vez que lo besó. Porque después de tanto tiempo... ahora. Siempre lo había sabido de alguna forma pero se negaba a creerlo.

Sus pasos lo llevaron al final hacia donde estaba ahora, sentado en la barandilla del puente. Mirando el oscura agua que parecía ser la respuesta. "Ojalá puedas sacar del pecho estas  lagrimas que tengo incrustadas dentro de mí", le dijo al río antes de escuchar el frenado de un auto y tomar impulso para saltar. "Adiós, Suga" murmuró para sí mismo y se entregó de brazos abiertos al vacío.