Castillo de Naipes

Es extraño como los peores y automáticos recuerdos se quedan bloqueados en el subconsciente de una persona, de tal manera funciona nuestro cerebro que hace que no queramos recordar lo peor de nuestras vidas para no volver a sentirnos dañados, pero en el fondo, siempre en el fondo queda algo de dolor.

Se dice que el instinto paterno aparece a penas tomas a tu hijo en tus brazos, que te auto programas para proteger a esa pequeña criatura que tienes frente a ti, que le enseñaras y velaras por su bienestar, ¿pero ¿qué pasa cuando ese instinto no existe?, que pasa cuando esperas ver el sol porque desde que recuerdas tu vida solo ha sido tormentas? Sigues teniendo fe, sigues esperanzado pensando en que en algún momento se detendrá, que todo terminará, que si estiras las sabanas quizás ese cinto rebote y no logre darte. Pero te lleva al límite, te quiebra una y otra vez, te hace sentir y creer que solo viniste para ser inservible al mundo, no eres lo suficientemente inteligente para poder hacer algo de utilidad, tampoco eres lo suficientemente bonita como para que te quieran, y tampoco eres lo suficientemente especial para ser amado.

Tomas todo ese dolor he intentas hacer algo bueno, defender a alguien más que esté pasando por eso, si ya te rompieron qué más da que te vuelvan a romper mientras no veas sufrir a quien quieres, ¿no? Si puedo alejar cinco centímetros esa mano de su rostro quizás pueda evitarle un dolor.

¿Pero quién hace eso por nosotros?, quien está dispuesto a ponerse en frente y decir "basta"? quien te quiere lo suficiente para tomarte del brazo y sacarte de ahí sabiendo las consecuencias de lo que pueda pasar? ¿Quién pondría su pecho para parar detener las balas que vienen hacia ti? Nadie. Porque te grabaron en la mente que no vales, que no mereces eso, y al final del día una parte de todo lo que te dicen es cierta, en la noche cuando cierras los ojos, pones música, apagas las luces, y estas solo, aprendes que un corazón no solo se puede romper por amor, sino que también porque alguien te quiere dañar a propósito. Te preguntas a ti mismo que hiciste mal, porque no mereces que algo bueno pase, comienzas a aprovechar esos pequeños momentos de libertad que logras encontrar en medio de tu vida, y caes en los excesos, ¿no hay nada que una botella de ron no te haga olvidar verdad? Un cigarro puede calmar los nervios, y un porro puede hacerte reír, pero día tras día volvemos a lo mismo, nos sentimos con resaca, pero esos momentos de bienestar personal nadie te los quitara por más que lo intenten a la fuerza.

La rebeldía comienza a consumirte, te crees que puedes ser la reina, nadie quiere ser princesa, eso es para niñas, la reina es la pieza más importante en el tablero, quieres ser una mujer y tu ego comienza a levantarse, las miradas llegan hasta ti y demuestras ser intocable.

Pero vuelve la noche, y vuelve ese monstruo cuando menos lo esperas a romperte, es casi como su deporte favorito y tú eres su juguete, la muñeca de trapo que puede lanzar contra las paredes y quedara ahí tirada para el siguiente juego cuando este aburrido, sopla tan fuerte que derrumba tu castillo de naipes una y otra vez, y tú eres tan terca que lo vuelves a armar, todas las mañanas.

Hasta que tomas ese maso de cartas y lo arrojas por la ventana para comenzar a construir con ladrillos un muro, "si nadie puede ver que siento, no pueden dañarme, si el me ve llorar le estoy dando en el gusto, si me ve reír romperá ese momento feliz" ocultamos todo, guardamos y guardamos tras ese muro todo.

Pero alto ahí, no nos demos por ganadores antes de tiempo, puede que el cerebro bloquee algunas cosas pero somos tan masoquistas que hay otras que no queremos borrar u olvidar, porque cuando eres lastimado una tras otra tienes opciones, sí, siempre hay opciones, yo tome la opción de ser más fuerte, de tomar el control de mi vida cuando las cosas no dieron a vasto, me hice la valiente siendo una niña, me levante del piso mojado lleno de vidrios, limpie mis lágrimas y espere a que amaneciera, siempre dicen que después de la tormenta sale el sol verdad? Entonces eso esperaría, el sol del otro día.