CAPITULO I "LA BODA"

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La he perdido para siempre, y no es hasta ese momento en que me doy cuenta de que ya no hay vuelta atrás, es definitivo. El dolor que siento era tan grande que temo que de pronto mi tamaño aumente debido a tanto dolor que cargo.

La vi entrar a la iglesia con su vestido blanco como la nieve e involuntariamente me imagine que yo podría ser quien la esperara al final del pasillo sin tan solo no me hubiera acobardado y en su momento hubiera luchado por lo que ella y yo teníamos, pero era demasiado tarde, ella había continuado con su vida y yo a pesar del dolor y la tristeza debía intentar lo mismo.

El tiempo que duro la ceremonia me mantuve absorto en mis pensamientos, cada palabra que me dijo la noche anterior se repetía una y otra vez sin parar en mi cabeza, y entonces paso, el momento en que diría sus votos, y en ese momento recordé que ella siempre dijo que no quería decir los típicos votos, ella quería decir algo propio, sincero y promesas que sin duda alguna sabría que podría cumplir.

­—Yo, Elisa prometo a ayudarte a amar la vida, a tratarte siempre con ternura y tener la paciencia que el amor requiere, a hablar cuando sea necesario y a compartir el silencio cuando no, a vivir en la calidez de tu corazón que siempre será mi hogar y a cocinarte hot cakes por las mañanas— todas las personas ríen ante la última oración pronunciada por Elisa, pero yo solo puedo ver la mirada de amor con la que mira al que en pocos minutos será su esposo. Cuando el sonido de la última risa cesa el sacerdote indica a Eric que diga sus votos.

Intento con todas mis fuerzas que cada palabra que él dice se guarde en mi memoria para de esa forma reclamarle a la primera que falle e incluso ponerle una paliza si hace que mi Elisa derrame una sola lagrima por él. Después de eso son más palabras dichas por el sacerdote hasta que llega el momento tan conocido de una boda, aquel en el que se comparte el primer beso de los ahora esposos. Aunque me exijo no ver la escena para no aumentar el dolor, mis ojos no parecen obedecerme y se quedan fijos a la espera de la escena que sé, terminara de romper mi corazón.

Y entonces ocurre, sus labios se juntan sellando aquella promesa que acaban de hacerse y mi corazón termina por romperse y junto con él se va toda esperanza de que ella y yo al final termináramos juntos.

A la salida de la iglesia me encuentro con Oswaldo, su hermano, —quien es mi mejor amigo desde que tengo memoria—, junto con su esposa e hija. Él parece entusiasmado por el matrimonio de su hermana y como prueba de ello esta su tan reluciente sonrisa y sus frecuentes bromas, y aunque quiero decirle que no estoy de humor porque acabo de perder al amor de mi vida no lo hago por respeto a nuestra amistad y en cambio muestro mi mejor intento de sonrisa. Estamos juntos muy poco tiempo porque él tiene que partir a la recepción para ver que todo esté en orden para la llegada de los recién casados, así que sin más nos despedimos y el parte con su familia.

Mi novia que va de acompañante mío no deja de expresar cuan feliz esta por la pareja y de insinuar cuento le gustaría a ella casarse y yo solo asiento porque la verdad es lo menos que puedo pensar por ahora es en mi matrimonio, y entonces, sucede, eso que estuve evitando con tanto ahínco desde el inicio de todo esto, toparme con ella de frente, sus ojos inquietos y luminosos se fijan en los míos y es tan claro la emoción que siente que juro que siento como un ardor se extiende por todo mi pecho hasta que cubre mi cuerpo entero.

—Muchas Felicidades Elisa— logro decir con todo el dolor, ella me da su sonrisa más sincera, me abraza y susurra

—Muchas gracias Mau— dice ese mote ridículo de mi nombre a pesar de que sabe que lo detesto.

En el momento en que la siento pegada a mí, me permito cerrar los ojos y pensar que nada de esto está pasando, pero entonces termina su frase y me toca a mí enfrentar la realidad, una donde ella está casada con otro y yo tengo una novia que me ve fijamente. A continuación, mi novia y ella se saludan y al igual que yo escucho como Paulina la felicita y Elisa contesta algo que no alcanzo a escuchar por el abrazo que se dan en ese momento, y yo tengo que enfrentarme a Eric, así que de la forma más correcta que puedo extiendo mi mano hacia el

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⏰ Last updated: May 02, 2020 ⏰

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El Destino no es suficienteWhere stories live. Discover now