Oh baby

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Un par de meses había pasado y de alguna forma el hotel se había puesto en marcha. Las renovaciones casi terminaban y tenían al menos 7 persona listas para mudarse cuando todo estuviera listo. 

Nada realmente llamativo había pasado más allá de Angel haciendo alguna estupidez, Husk bebiendo demasiado o Veggie sospechando constantemente de Alastor, sí, todo parecía ir muy bien, pero el demonio de la radio estaba comenzando a aburrirse y eso se debía a que Charlie estaba demasiado ocupada con cosas administrativas o la mejor amiga de esta simplemente no lo dejaba estar a solas con ellas. Ah la pequeña Charlie, tan buena y pura a pesar de ser la hija del mismo Lucifer, siempre queriendo ayudar y siempre con una sonrisa en su rostro, con una canción en su corazón... Cuánto amaba esto último el pelirrojo. En todos sus siglos viviendo en el infierno solo había conocido unas pocas almas con esa pasión por la música y ahora que lo pensaba desde el gran fiasco en la televisión no había vuelto a oír la melodiosa voz de la rubia. Ampliando aun más su tan conocida sonrisa se dirigió tarareando una canción hasta el lobby. 

Cuando llegó hasta allí lo primero que pudo ver fue a Veggie discutiendo con la araña de botas altas, soltó una leve risilla, le habían ahorrado la mitad del trabajo.

-¿Qué sucede mis queridos amigos? ¿Por qué la pelea? -se acercó hasta ellos-
-No soy tu amiga, desgraciado. -respondió la albina de manera cortante-
-Hey, fresita, ayúdame aquí. -pidió Angel- Solo quiero salir a dar un paseo pero la señorita mandona no quiere dejarme.
-No vas a salir, sé que solo vas a causar problemas. -respondió apuntándole al rostro-
-!Oh mis queridos, tengo la solución a su problema! -exclamó Alastor- Resulta que estuve pensando en que nuestra querida Charlie ha trabajado muy duro y sin descanso por todos nosotros así pensaba en prepararle un estupendo banquete para la cena de esta noche.
-¿Y eso cómo resuelve mí problema? -preguntó Angel cruzando sus brazos superiores mientras los inferiores se posaban en sus caderas-
-Veran, yo prepararé la cena, por supuesto, pero desconozco qué plato es el favorito de nuestra pequeña... -hizo un gesto teatral con la mano- Así que pensaba pedirle a usted Señorita Veggie que fuera tan amable de decírmelo, además de ir a comprar todo lo necesario ¿Quién sino su mejor amiga en este basto infierno sabe el plato que hará saltar de alegría a nuestra preciada princesa?
-¿Crees que te dejaría solo con Charlie? -le miró entrecerrando el ojo- 
-¿Solos? Oh no, no, no mi querida, Niffty corre de aquí para allá a la velocidad de un rayo y está constantemente haciéndome preguntas sobre la remodelación, así que donde sea que este yo también estará ella. -ahora entrecerró él sus ojos- Al volver puedes preguntarle directamente a ella que he estado haciendo, sabemos que no te mentirá. Así nuestro afeminado amigo podrá salir y tú podrás mantenerlo a raya, agregando la ayuda extra para traer las compras.
-Eh, no suena tan mal... -respondió Angel y miró a Veggie- ¿Qué dices?
-la albina pasó su mirada por ambos, quería protestar pero se contuvo al pensar en su amiga, casi no la había visto por tanto trabajo- ...Creo que puedo tener un platillo en mente... PERO SI LE TOCAS UN SOLO CABELLO--
-¡ESTUPENDO! -proclamó el pelirrojo- Aquí está mí billetera, el dinero que necesiten estará ahí, les doy mi palabra de caballero. -puso sus manos en la espalda de ambos y los arrastró hasta fuera del hotel- Nos vemos en un rato. -y cerró de un golpe-

--

Charlie se encontraba sentada en frente a su gran escritorio totalmente repleto de papeles -que también cubrían parte del piso- muy importantes sobre el hotel. Leía lo más rápido uno para poder comenzar pronto el siguiente. 

Estaba agotada, física y mentalmente, incluso aunque siempre supo que llevar el hotel sería un trabajo duro gracias a la ayuda del Demonio de la Radio todo estaba pasando inesperadamente a gran velocidad, casi no tuvo tiempo para acostumbrarse al cambio. Desde hace una semana que pasaba la mayor parte de su día encerrada entre esas cuatro paredes, con suerte comía o iba al baño y solo hoy había podido darse una ducha -y lo agradeció como nunca, ya estaba comenzando a oler bastante mal-; mientras dejaba escapar un pesado suspiro sintió unos leves golpes en la puerta.

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⏰ Last updated: Nov 13, 2019 ⏰

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Little demon Princess and The Radio DemonWhere stories live. Discover now