Capítulo 1

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¡Holaa!
Editando ando, tiene muchas faltas de ortografía, así que probablemente empiece con las modificaciones necesarias y bueno, seguir con la historia.

En esta historia solamente el trio de brujas (Lee, Charlotte y Amber) serán chicos, los demás personajes seguirán igual.

Lynn será mi sucrette, en este caso ustedes pueden llamarla como la suya o algún Oc que tengan, todo queda a su imaginación snsjd, en fin, los dejo con el capítulo ❤️
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Verano, la época más esperada del año por todos los estudiantes de todo el mundo donde esperan disfrutar de las esperadas vacaciones. Las clases estaban por terminar y las vacaciones estaban cada vez más cercas y eso, a muchos de los estudiantes los llegaba a emocionar.

Sin embargo, a Castiel le daba igual, no le tomaba tanta importancia a lo que sucedía a su alrededor, simplemente veía por la ventana y bostezaba un par de veces, no estaba del todo contento, dos semanas más y estaría libre de lo que considera su martirio.

—¿Vas a salir? — Comentó Lysandro viendo su cuaderno de notas, leía y releía una y otra vez, sí, las vacaciones de verano estaban cercas y con ellos los exámenes. — Claro, no tengo nada que hacer aquí.— Respondió Castiel al levantarse e irse, Lysandro simplemente negó.
No apoyaba del todo a su amigo, no cuando se perdía clases simplemente para ir a fumar un cigarrillo o tomar una siesta, pero tampoco le iba a dar un sermón sabiendo que a su amigo le daba completamente igual. Lo conoce demasiado como para dejarlo pasar.

Castiel subió las escaleras hasta llegar a la azotea, el lugar era perfecto para poder dormir un poco o bien, fumarse el cigarrillo que llevaba consigo casi siempre.
Tras abrir la puerta escuchó varios sollozos que salían detrás de una caja de balones viejos, Castiel se preguntaba quién más podía ser si en ese sitio no había nadie más. Dudaba en darse la vuelta y dejarlo pasar, pero también estaban sus cinco minutos de descanso en juego.

Descartó la idea de que fuese algún profesor o el señor delegado, a ese chico siempre se le veía bien, así que no tenía nada que hacer allá arriba llorando.

Su curiosidad aumentó tras escuchar algunos quejidos mezclados con los sollozos, se acercó lo más que pudo visualizando una pequeña silueta detrás de la planta que se encontraba ahí, justo al lado de la caja. Castiel no esperaba verlo llorar y menos de esa manera, lo había visto un par de veces y siempre pensó que sería el blanco perfecto para los bravucones y más para el trío bravucón del instituto. Pero nunca imagino que sí podía serlo en tan poco tiempo.

Tanta fue su sorpresa que había olvidado lo que iba a hacer en la azotea, así que lo dudo por un momento, pero si podía animarlo y hacer que se fuera, lo haría.

— Hey, ¿Te encuentras bien? — Preguntó haciendo a un lado los balones que impedían ver a Ken, el pequeño solo asintió y limpio sus mejillas.
— ¿Seguro? — Volvió a preguntar, está vez, aquel chiquillo de cabellos castaños negó. Las lágrimas que habían cesado nuevamente se encontraban por sus mejillas.
Castiel suspiro y maldijo el haberse involucrado, sabe que no será fácil deshacerse de este problema, pero debía hacerlo, si alguien más los veía, obviamente se prestarán a malos entendidos y culparan a Castiel de los sollozos de ese chico.
— Mira, no tengo tiempo para esto, ¿vas a decirme qué es lo que te pasa? O vas a seguir llorando.. — Kentin negó con la cabeza tratando de controlarse un poco. Se encontraba más tranquilo, por lo que decidió hablar.

— André y sus amigos se la pasan molestándome cada minuto. Y-yo no hice nada para que me molestaran, simplemente vengo aquí a estudiar y ellos, ellos no pierden ni un momento para humillarme...— Castiel suspiró. De alguna forma sabía que el delegado estaría involucrado en esto, no es que tuviera la culpa, pero sí estaría involucrado indirectamente por culpa del inepto y poco maduro de su hermano menor.

— Conozco al trío que mencionas.. Deberías simplemente hablar con Nathaniel y comentarle la situación, no es que pierdas mucho, tan sólo podría hablar con sus padres y así poder evitar que siga con su estúpido comportamiento el niño mimado de mami. — Kentin negó rápidamente, sabía que podía hacerlo, pero lo que menos quería era involucrar a sus padres. Castiel no entendía del todo, así que suspiró y se sentó a su lado. Encendió el cigarrillo que llevaba en su bolsillo, Kentin lo miró y después bajó la mirada. — Te hará daño.. — Murmuró, Castiel sonrió y asintió, lo sabe, pero no es algo que le preocupa. Al menos no por ahora.
— Descuida, bien dicen que hierba mala nunca muere, no creo morir tan pronto.— Guiñó el ojo y exhaló el humo, volvió su mirada a Kentin. —Lo que quiero saber es que porque no has dicho nada, ¿te han amenazado?
— N-no.. Pero si mis padres se enteran de ello, podrían mandarme a la escuela militar. No quisiera dejar el instituto. — Castiel se quedó por un momento en silencio, lo que le ha mencionado le llamó la atención, ¿Quién en su sano juicio haría tal cosa? Deben estar locos. — Vale, pero... ¿Qué tiene que ver eso con André y sus verdugos?— Kentin levantó la mirada al cielo y comenzó a hablar.
— Mi padre ha dicho que si volvía a dejar que esos tres chicos me molestaran, me enviaría a la escuela militar para aprender a defenderme y ser más "hombre". Menciona cada que puede que estaría avergonzado de tener un hijo debilucho y bueno para nada, que eso arruinaría su reputación.— Castiel lo escuchaba con atención, entendía más o menos la situación, ahora comprende el porqué se escondía y no afrontaba sus problemas.

— Mi padre es militar, es por ello que no le gustaría tener un hijo como yo, pero tampoco es como si me gustara ir por la vida agrediendo a los demás.. — Kentin se levantó de su lugar y sacudió sus ropas. Estaba por irse, no quería, pero ya había faltado a tres clases en un día, no podía faltar más. — Ah, no me he presentado, aunque ya deberías saber mi nombre, estoy contigo en las mayorías de las clases. — Castiel sonrió un poco, si es sincero, no sabe quién diablos es. — Soy Kentin, mucho gusto, Castiel. — El mencionado sólo  asintió. No era de presentaciones formales, tan sólo le hizo una seña pequeña con la cabeza y Kentin volvió a la puerta hasta salir a las escaleras.

No entendía cómo es que un chico como él fuese tratado así. Sabe que es algo en lo que no debería meterse, pero algo en ese chico llama su atención, y eso no es para nada normal en Castiel, quizás por eso de ahora en adelante no lo dejará estar solo ni un sólo momento, no cuando sabe quién está detrás de todo esto. Si podía ayudar en algo en contra de ese trío de idiotas, lo haría sin pensarlo dos veces.

Enamorándome de ti [Castiel x Kentin] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora