En línea con la realidad.

La ruptura a duelos

Tras una ruptura amorosa ¿qué es lo que en verdad se siente? 

Después del indecoroso llanto y los miles de reproches, ¿qué es lo que en verdad duele?

De pronto el ciclo parcialmente cerrado se encuentra con el choque de que no puede ser bloqueado con paredes de silencio e ignorar lo que en realidad pasa. 

Comienza la aceptación de los hechos, que a múltiples puntos de vista llenan un espacio mental con putrefactos recuerdos y sensaciones. La soledad se manifiesta como principal acompañante, y con lentitud detestable te hace avanzar a lo nuevo que hay que afrontar.

Vives el duelo contigo mismo, el duelo que representa en vida lo que es debatir con tu yo interno acerca de lo que es bueno para "ambos". Y con ambos me refiero a esa parte de ti que es un completo imbécil y la otra, que es la parte racional. Inefablemente se cae al punto en que tu carácter (al momento del duelo) es una fusión de estas personalidades. 

Entonces y sólo entonces comienzas a ver a tu ex-pareja desde un punto de vista diferente, algo despreciable, y aún con restos de amor que acompañan recuerdos "compartidos".

Momentos y memorias que viven en el olvido de la otra persona. 

Inicia la parte en la que crees que el amor no fue destinado para ti, cuando en realidad tu mente no puede soportar el hecho de poder encontrarte con más decepciones. 

Surge a ti la idea de que posiblemente la vida tenga un tipo de "misión" para ti, y que no fue una ruptura sino un libramiento, te preparas para dar conclusiones, para posteriormente expulsarlas y sentirte parcialmente liberado.

Entonces, ¿lo que duele es saber que no hay alguien ahí? ¿duele la soledad? ¿duele recordar?

Duele saber que invertiste tiempo auto flagelando tu existencia, llorando y reprochando lo que sucedió, duele el tiempo perdido, y duele aún más saber que aún lo estas perdiendo.