Shōto se ha enamorado.
Todo inició de la manera más bruta posible. Cuando menos se dió cuenta, estaba profundamente enamorado del gruñón de su salón. Decidido, empezó a dejarle un girasol en su pupitre con una nota anónima con el fin de que se enamo...
Su lengua parece estar acostumbrada a lamer de esa manera, pasearla por toda la longitud de aquel pedazo de plástico en forma de pene para después atrapar la punta con sus labios, chupando con un ritmo lento, deteniéndose a disfrutar cerrando los ojos y dejándose llevar imaginando, quizá, un miembro viril de verdad.
¡Pero claro que había mucho que declarar!
De verdad era extraño pasar de nada a tanto. De ser un mojigato a tener que estar encerrado en su habitación en medio de la oscuridad dándose placer con su mano derecha en donde puede darle con tantas ganas a su deseo sexual. De verdad fantasea con que esos labios sean los que recorran su pene, besando y chupando, que sea esa lengua la que recorra toda la extensión de su placer y que beba hasta la última gota de su deseo desenfrenado.
Se sentía estúpido pero había algo en ese actor que le hacía sentir de esa manera, que le había sacado de su zona de confort para darle a conocer una parte de él que no había conocido antes.
De pronto mira a su derecha en donde descansa aquel girasol que le daría al tipo que le gusta al día siguiente. Vuelve a centrar su mirada en ese sujeto de ojos penetrantes que se esconde detrás de ese antifaz oscuro, que deja ver cualquier centímetro de su cuerpo exceptuando su identidad.
Tal vez por eso lo seguía viendo. De verdad él le recordaba al chico que le gusta.
Sentirse sucio es decir poco, pero ahora no ha dejado de darle justicia a su miembro viril ni un misero descanso.
—Mírame, bastardo. —Él asiente con la cabeza acomodándose bien la mascara que está a la mitad y sólo deja ver su lado derecho.
—Lo hago —susurra atendiendo su erección frente a ese actor porno amateur que le había regalado una videollamada erótica por ser tan buen espectador.
—Deseo demasiado mamártela. —La sonrisa sardónica de ese sujeto hace que sus mejillas se enciendan. Aunque claro, también desea que lo haga.
De pronto siente que todo es tan complicado. ¿Por qué hace algo como eso con un desconocido al mismo tiempo que le entrega sus sentimientos al tipo que le gusta? No lo sabe. Ese sujeto de verdad hace que haga cosas que jamás imaginó hacer.
—¿Quieres que la meta? —Su sonrisa, oh, su sonrisa, asiente de nuevo con la cabeza y el actor amateur porno la ensancha más—. Shōto, de verdad eres mi espectador favorito.
＝★
De: sweetkatsuki@outlook.com
Para: theshoto01@outlook.com
Asunto: Espectador número uno.
Deseo mucho volver a repetir esto. Nunca lo había hecho antes y no negaré que fue excitante.
¿De verdad te gusta alguien? Deja de jalártela pensando en mí por un momento y ten los huevos para decírselo.
Aunque, por otro lado, sólo deseo que seas para mí.
Me siento muy tonto diciéndolo, pero no puedo sacarte de mi mente, creo que por eso acepté tener este tipo de sesiones contigo solamente; me escuchas, hablas conmigo, eres tan tierno y aunque no pueda verte el rostro siento que me gustas muchísimo.
Es estúpido, pero es la verdad.
Sólo no me lo recuerdes porque ya estoy bastante avergonzado.
*** Este fanfic estará censurado en Wattpad y disponible en otra plataforma totalmente explícita. Para mayor información, sigue el canal de Whatsapp.
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