no es lo que parece

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Ningún personaje, ni nada, me pertenece, son del Anime / Manga Kimetsu no Yaiba que pertenecen a Koyoharu Gotōge.

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Una llamada interrumpe justo cuando Tanjirou está haciendo el trabajo encargado de esa noche.

El burdeo tararea buscando en el bolsillo trasero de su pantalón el aparato que sonaba con una tonada única de cierta persona, en cuanto lo toma el celular automáticamente su dedo desliza para aceptar la llamada y lo lleva hasta su oreja.

—¡Buenas noches, Zenitsu-san! —Contesta la llamada y sonríe para si mismo.

Del otro lado del celular se escucha un ''Tanjirou'' con un suspiro ''Te he dicho que me llames sólo Zenitsu, en serio''.

—Lo lamento, Zenitsu. —Se disculpa enseguida y se oye sinceramente apenado. —Han pasado meses, es la costumbre.

''Está bien'' hay una risa en el fondo y es encantadora para el oído de Tanjirou en ese momento. ''¿Vendrán a cenar?''

Tanjirou le echa una mirada a Nezuko, ella le mira con las cejas arqueadas y una sonrisa de complicidad, con esto arquea una ceja y le hace un ademen con la mano a su hermana que deja escapar una pequeña risilla.

—Claro que sí, Zenitsu. En cuanto acabemos de trabajar, Nezuko y yo iremos para allá. Muchas gracias por invitarnos. —Rasca su cuello un poco y se gira para no tener que ver los ojos de su hermana que siguen viéndole con picardia.

''¡Ya deja de agradecer, tonto! Aquí te esperare, Inosuke también vendrá esta noche''.

La llamada termina después de un rato, al burdeo le molestaba tener que colgarle al rubio, no todo el tiempo tenía el placer de recibir una llamada de parte de este, pero tenía que acabar lo que estaba haciendo y, según, Zenitsu le dijo que tenía que terminar con la cena también por lo que ambos estaban ocupados en lo suyo.

—¿Y qué tal estuvo?

—Tenemos que acabar con esto rápido, Zenitsu nos espera con una cena. —Dice volteando para ver a Nezuko, suelta un suspiro y con cuidado agarra las mangas de su camiseta hasta llevarlas a los codos. Así es más comodo.

Nezuko sonríe feliz, se vuelve a lo que estaba haciendo y extiende una mano para sacar el pedazo de tela que cubría la boca del sujeto que era el objetivo de ese día.

La habitación estaba totalmente oscura en esa habitación del edificio abandonado en donde se encontraban por lo que era un tanto difícil distinguirse, siquiera veían sombras por la luz de afuera en las calles, no hay nada allí más que ellos tres y unn vieja mesa llena de musgo. En medio del cuarto, un hombre amarrado a una silla vieja y rota, los piez en cada lado de las patas y las manos en la espalda.

—¡Por favor! ¡Déjenme ir! ¡Les daré todo el dinero que quieran! ¡Todo lo que quieran! —El hombre robusto suplica piedad con lagrimas en los ojos. Se retuerce buscando liberarse y es inútil.

Los hermanos Kamado se echan miradas ante la escena dramática que montaba el hombre delante de ellos, se sonríen un tanto divertidos y encogen los hombros ignorandole. Nezuko pone en los ojos del sujeto una cuerda, juega con ella frente a la cara de este y luego se la amarra al cuello.

—El cliente fue muy claro, no vamos a matarte. —Tanjirou empieza a hablar mientras se toma el tiempo de leer la carpeta de trabajo. —No tenemos porqué, sólo nos ha pedido que nos des cierta información y te dejaremos ir. —Tira la carpeta en la vieja mesa y se aproxima al hombre para sujetarlo de la cara usando fuerza, pero no demasiada. —Te juro que soy amable, lo soy, no te he hecho realmente nada, pero ella no es tan amable. —Hace un ademen con la mano para señalar a Nezuko que estaba atrás queriendo tirar de la cuerda. —Ella va a estrangularte hasta sacarte los ojos de las cuencas si no nos das lo que queremos.

no es lo que parece - TanZen [One-shot]Where stories live. Discover now