historia 1 parte 1

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Todo empezo muy normal, estábamos mi novio y yo en mi habitación riéndonos abrazados y en un momento me dijo que iba a hacer algo.

- ya vuelvo- me dijo y salió por la puerta de mi habitación, pero automáticamente casi al instante de haberse ido vuelve, pero algo estaba mal, era como si no recordara que me dijo que iba a salir a hacer algo, a lo que le pregunté.

-¿Qué pasó? ¿no ibas a hacer algo?
Pero él solo me miró con cara rara como si nunca hubiera dicho que iba a salir.

Yo en ese momento no le presté mucha atencion pero algo andaba mal, algo me decia que él no era él, una sensación, un presentmiento, algo no me cuadraba y no me dejaba tranquila.

Se me serca como para besarme pero me toma de las manos con fuerza, mi novio nunca me obliga a hacer nada a la fuerza, pero ese no era mi novio.
Tenia que sacarme la duda a lo que pregunté

- Espera ¿cuál es tú nombre?

- Sam -dijo con una mirada macabra.

- ¿Sam qué?

- Samuel

- Noo, tu apellido - dije impaciente.

- Biesac

De repente sentí un escalofríos, el nombre de mi novio es Samuel Biersack, pero el pronunció Biesac. En ese momento me aterre, aunque no estaba segura de porqué solo sabía que tenia miedo.
Él no se me acercaba, me miraba con cara de desquiciado desde el otro lado de mi habitación. Tenia que buscar una excusa para salir de ahí.
-¿ Tienes hambre ? - me sorprendí a mi misma de lo tranquila que sonó eso.

-...

- Voy a la cocina a buscar algo de comer - dije y salí.

Mi madrastra estaba sentada en la mesa de la cocina viendo una serie, me le acerqué muy despacio y le dije en voz temblorosa y muy baja.

- Tenemos que salir de acá, ese no es Sam.

- Jajajaj que bolacera - dijo sonriente - si hasta recién estaban lo mas bien y ustedes nunca se pelean - su sonrisa desapareció al ver mi cara de susto - ¿Pasó algo?

En ese momento veo que ese supuesto "Sam" venia con cara de desquiciado hacia nosotras, me asusté y tome por el brazo a mi madrastra arrastrandola conmigo hacia a fuera de la casa, en cuanto salimos note que mi casa si era realmente mi casa, pero lo demás no, yo vivo en una casa quinta vastante alejada de la ciudad, tiene muchos arboles, una piscina, un quincho, un caminito de piedras y uno de tierra roja por donde pasa el auto, ese camino conecta la entrada a la quinta con la casa, una mini rotonda con un pino y varios faroles esparcidos por el parque de mi casa. Pero ese lugar era enorme, solo habia un camino de tierra negra que conducía a la salida y mirara para donde mirara solo veia campo y árboles.

Corriamos aterradas hacia la salida, lo cual fue raro porque uno en los sueños no puede correr sin dificultad, pero era diferente, era como si realmemte tuviera que escapar de él.

A lo lejos veo venir a un chico en una bicicleta roja. Era él, ERA SAM mi novio. Al verlo, la cosa esa se enloqueció y comenzo a correr más rápido haciendo ruidos extraños. Estabamos aterrorizadas y tan solo a unos pocos metros de la tranquera cuando Sam entro al predio y se acerco hacia nosotras, yo me abalance sobre él y me abrazó.

-¿ qué pasó amor ? - dijo con cara desconcertante - te dije que volvia enceguida- y sonrió.

De repente todo estaba bien, esa cosa habia desaparecido en cuanto mis brazos alcanzaron los de mi novio y no lo entendia, hasta parecia que mi madrastra habia olvidado lo que pasó.

- no sé, creo que salimos a correr - dijo mi madrastra jadeando.

Efectivamente, lo habia olvidado y aparente mente Sam no vio a la versión de sí mismo siguiéndonos, todo era muy raro.

mis sueñosWhere stories live. Discover now