"reprobar"

168 16 3
                                    

Miedo. Una palabra más para muchos; pero para otros, una bastante... interesante. Dolor en el estómago, temblor en las manos, ganas de darse por vencido, volver pasos atrás. Eso, eso era exacto lo que Harry sentía en ese momento. Pero no nos adelantemos, vayamos, especificamente, ocho semanas atras.

Ya en tercer año de secundaria, el conocido Harry Potter, odiado o temido por muchos, pero tambien amado y amigo de muchos otros, se preparaba para una de sus asignaturas preferidas: Pociones. Todo mundo sabe, que en Hogwarts, el profesor de Pociones es un hombre tacaño, de pelo graso, antipático y sin ni un solo amigo. En contra de los estudiantes que no sean de Slytherin. No hace falta aclarar que tambien, era la persona en el mundo, quiza, que mas odiaba a Harry. Pero aquel odio no era muruo, algo hacia que a Harry de alguna manera le divirtieran sus discusiones. Cualquier cosa que el azabache dijera, el lo cuestionaba. La relación de alumno y profesor de aquellos dos era divertida y estresante. A veces las personas solo querían que maduraran un poco y dejaran de pelear.
-Harry ¡Harry!- Ron, frustrado, zarandeaba a Harry, que se habia quedado dormido en la clase de Pociones mientras Ron le contaba sobre el rechazo de Jhoanna Fillz, la chica nueva que habia quedado en Ravenclaw.
-Dejen de cuchillear- Casi gritó Severus, con su voz quebrada, hacia los dos amigos.
La clase siguió como siempre, hablando de plantas curadoras de heridas, o esas cosas que un muggle no entendería.
-Ron, podemos irnos ya? Tengo mucho hambre- se quejó Harry mientras Ron esperaba fuera del aula de Pociones esperando para coquetear con Jhoanna.
-Solo... solo vé tú y ya- Respondió Ron, y Harry se dirigió hacia el Gran Comedor, sin percatarse de la presencia de Snape detras de él.
-Potter, debemos hablar- Harry se sobresaltó al escuchar la voz de su profesor detrás suyo.
-Ok, ¿De qué quiere hablar?
-Hum no, aquí no. Sígame.
Harry y Snape se dirigieron a lo que se podría llamar oficina, pero no llegaba a ser ni más ordenada que el cuarto donde Arthur Weasley colecciona sus cosas.
El muchacho se agarró de su panza, había sentido como pequeñas mariposas revoloteaban dentro de él.
-¿Se siente bien?- Snape miró a Harry a los ojos, lo que no solo hizo que las mariposas de el más chico aumentaran, sino que también hizo aue el profesor las sintiera.
-si, claro ¿Por qué quería verme?- Harry desvío su mirada incómodo, y Snape le copió.
-Pasa que si usted no aprueba pociones, reprobara el año, ya sabe de lo que hablo. Más vale ponerse a estudiar.
Harry solo asintió, aún con las mejillas coloradas -¿Algo más?
Severus vaciló un instante. Habia planeado decirle aquello a Harry desde hacía ya mucho tiempo, pero decidió no hacerlo.
-No, puede retirarse.
Harry se levanto de la silla de madera, que al estar inestable crujió; y muy confundido, salió del lugar.
El único presente miró en ambas direcciones, como si quisiera asegurarse de que nadie lo viera, y sonrió. Sonrió como cada vez que llegaba de darle clase a los de tercero. Algo le hacía sentir Harry, algo que el nunca supo que podía sentir.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 22, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Snarry - Harry Potter x Severus Snape - MinicuentoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora