"Yo Haría Todo Por Ti"

💫cap. 1💫

Esta es mi primer historia y espero que les guste tanto como a mi el escribirla.

Gracias por darle una oportunidad, disfruta de tu lectura.❤❤

...

~🐰🐰~

Era un día normal y un nuevo estudiante se unía a este nuevo semestre en una de las más prestigiosas universidades del país, se trataba de xiao Zhan, un chico de 19 años al que todos miraban con asombro pues era el chico nuevo y a decir verdad xiao era un chico que no podía pasar desapercibido, era un joven muy atractivo por lo que no era de esperarse tantas miradas por parte de sus compañeros, era tan atractivo que incluso muchos chicos además de las chicas se quedaban impresionados por el, xiao era un chico alto, delgado, con rasgos finos en su rostro, piernas largas y una cintura pequeña, le gustaba ser visto siempre con un porte elegante, incluso con un uniforme tan simple se miraba muy apuesto.

xiao no sabía porque se sentía tan nervioso, normalmente le daba igual a donde lo enviarán a estudiar sus padres, para el siempre era lo mismo, estudiar en un lugar para después ser cambiado a otro si sus padres tenían que viajar a otra ciudad y quedarse ahí un tiempo por sus trabajos, el como un buen hijo sólo obedecía o aceptaba cada decisión que ellos tomaban pues en realidad no tenía ninguna otra opcion.

~ xiao zhan~

Me sentía un poco extraño, era algo nuevo para mi, me sentía nervioso de estar en este lugar nuevo aunque lo más seguro es que no duraría aquí ni dos meses para después volver a irme, aveces odio estas pequeñas cosas de mi vida ya que siento que no disfruto estas últimas etapas como un chico normal.

De pronto escuche una voz que me saco de todos esos pensamientos.

*Hola, ¿tu eres xiao Zhan? - decía la voz delicada de una chica.

*Si, si soy yo - dije girandome para quedar frente a ella.

Esta era más baja que yo, era muy hermosa y su piel era muy blanca, tenía unos ojos encantadores y su sonrisa era muy bella.

* entonces sígueme, me pidieron que te diera un recorrido por el lugar pero primero te llevaré al salón de clases.

Yo solo asentí y la seguí.

* ¿y como te llamas? - sonreí un poco nervioso.

* Soy meng ziyi pero sólo dime ziyi - dijo dándome una bella sonrisa.

* Es un gusto conocerte ziyi, y como sabes, mi nombre es xiao Zhan pero puedes decirme sólo zhan - le dije mostrándole una leve risita de mi parte.

* Este es nuestro salón de clase - nos adentramos en el salón, y de pronto todos fijaron sus miradas en nosotros, pero las miradas pronto sólo se dirijeron a mi y los murmullos no se hicieron esperar - puedes sentarte con migo, la clase está por empezar - ziyi se sentó y la seguí rápidamente.

* gracias por permitirme sentarme contigo, no conozco a nadie y estoy algo nervioso - estaba aliviado de que ziyi no pareciera interesada en mi, pues solía ser algo molesto.

* descuida, yo no tengo mucho tiempo en esta universidad, llegue hace una semana y tampoco conozco a muchas personas, pero por lo que veo para ti no será un problema - eso último lo decía con una sonrisa pues todos en el aula aún me miraban como depredadores asechando a su presa.

* en realidad no soy muy sociable - dije apenado y nervioso.

* ya veo, entonces seremos buenos amigos - sonrió.

Los jovenes siguieron charlando hasta que las clases terminaron, la pareja se despidio con un beso y un abrazo, aunque acababan de conocerse la confianza que tomaron fue inmediata, ambos fueron recogidos por sus chóferes para después regresar a sus respectivos hogares.

~xiao zhan~

estaba llegando a mi casa cuando note que el auto de mis padres se encontraba en la casa, esto era extraño ya que normalmente estaba fuera de casa y solían llegar por las noches, ya me había olvidado de la última vez que pase un día entero con ellos.

Al entrar a la casa, vi a mis padres los cuales se encontraban en la gran y elegante estancia de la casa o mejor dicho mansión, pues mis padres eran reconocidos empresarios por lo que eran muy ricos.

Una voz conocida pronto se escucho.

* Zhan al fin llegas, te estábamos esperando - mi padre se levantó de el sillón en el que estaba con mi madre.

* ¿que pasa padre? - dije acercandome más a donde estaban ellos para hacer una pequeña reverencia.

* zhan, hoy iremos a cenar a casa de uno de nuestros amigos, la cena será a las 7:00 p.m y nos acompañaras, será bueno para ti ya que irán otros hijos de algunos colegas de tu edad - dijo esto para hacer una seña a mi madre quien de inmediato se levanto.

* pasaremos por ti serca de las 6:40p.m. tenemos otros asuntos asi que nos vamos - mi padre sólo me miro con seriedad para después tomar del brazo a mi madre y ambos salieron de la casa dejándome ahí con un profundo silencio.

* Yo estoy bien... gracias por preguntar - dije en voz baja y con una pequeña sonrisa fingida... viendo como mis padres se alejaban y me dejaban sólo de nuevo.

Después de todo ya me e acostumbrado a la seriedad de mis padres y a la falta de atención hacia mi, pero cuando ellos me ordenan algo yo sólo inclinó mi cabeza y acepto, a si es nuestra relacion, ellos sólo piden y ordenan, y yo sólo me callo y acepto sin ninguna objeción, lo que es muy lamentable de mi parte.

Xiao zhan ya estaba acostumbrado a este tipo de tratos por parte de sus padres y a estar solo todos los días en una enorme casa, a veces sólo se preguntaba el porque seguía ahí, las horas pasaron y ya eran las 6:35 p.m. xiao zhan ya se encontraba listo, vestía un traje negro con algunos detalles rojos en el, este se miraba muy bien en su cuerpo para sólo ser un traje tan simple.

~Xiao zhan~

Estaba listo esperando en la estancia, pronto dieron las 6:40 p.m. y una limosina se estaciono en la entrada, así que salí y me subí en esta, vi a mis padres los cuales se miraban muy elegantes aunque esto ya era lo normal, al tomar asiento enfrente de ellos mi mama no dudo en verme de arriba a bajo.

* debiste ponerte un traje más elegante... al menos no te ves tan mal - esta seguía mirandome al igual que mi padre el cual sólo asintió ante las palabras de mi madre.

* lo siento madre, hare lo mejor que pueda en otra próxima ocasión - dije inclinando mi cabeza un poco, en forma de disculpa para después enderesarme y con una sonrisa - te ves hermosa madre, como siempre - le sonreí falsamente aunque mis palabras eran ciertas.

Mi madre era una mujer hermosa, una mujer delicada, inteligente y elegante con su bella larga y negra cabellera, era una mujer realmente bella y con clase, por otro lado mi padre era un hombre muy intimidante con un rostro frío y su alta estatura, aunque era muy atractivo nunca perdía su
elegancia la cual se fucionaba perfectamente con mi madre. Yo sabía cuanto se amaban aun que nunca demostrarán su afecto, incluso ya e olvidado la última vez que mi padre abrazo a mi madre de forma cariñosa o la última vez que la beso, sólo me limite a mirarlos.

Ellos eran realmente serios, mi madre pocas veces se limitaba hacerme escasos halagos aunque siempre acompañados con un regaño o algún sermón corto, pero esto ya era una costumbre, me había acostumbrado a vivir sin el amor de mis padres y si alguien me preguntaba que era el amor...  creo que jamás encontraría la respuesta, ya que ni siquiera tengo el amor de mi familia, ellos hace tiempo que dejaron de interesarse en mi, deje de importarles y sólo me dirigían la palabra cuando necesitaban usarme, cuando hacía algo mal o cuando encontraban alguna forma de mantenerme ocupado según ellos.

Sabía que mi padre solo me tenía a su lado por que yo tomaría las riendas de la empresa al graduarme y para un robot como yo que siempre estaba a la merced de sus dueños siempre estaba cercas de el a su disposición, ni siquiera sabía cuando me convertí en un muñeco con el que hacían lo que querían, siempre era así, y sólo me quedaba la esperanza de algún día liberarme de todo pues en alguna parte de mi lo presentía, en realidad hace tiempo que pude irme lejos de ellos pero sabía que los necesitaba, necesitaba que ellos me perdonaran, que ellos me quisieran y no solo lo aparentaran, siempre trate de llamar su atención con la esperanza de algún día escuchar un "estamos orgullosos" pero para ellos parecía que nada era suficiente y eso me dolía... el saber que jamás sería suficiente para ellos ni para nadie, pero... ¿ qué debía hacer?