Bienvenido al Cielo
28. Se suponía que la vida era sencilla. Haz tu mejor esfuerzo, sé desinteresado, cumple tus promesas y espera el resto. Pero la vida, como la suerte, tiene mente propia. ¡Hola! ¡Encantado de conocerlo! ¿Puedes decirme dónde estoy? Un shinobi descarriado se despierta en el cielo y comienza a hacer preguntas. Pero este...