¿Cómo le hago? ¿Qué le digo? ¿Cómo se lo pregunto? Esas eran las preguntas que Adrián se hacía desde el sofá de su apartamento, puesto que llevaba semanas pensando en proponerle matrimonio a Emma pero no quería arruinarlo y ese detalle ocupaba su mente día y noche. ¿le dirá que sí? ¿No quiere dar el siguiente paso? te invito a descubrirlo en las líneas de esta obra. la inspiración de esta historia se la debo a una canción, gracias a ella esta idea se pudo concretar.