Todo lo que hizo, no tenía perdón. Él merecía un castigo, y yo sería quien se lo impondría...solo necesitaba tiempo. Escapé con la finalidad de cumplir esa promesa, llevando conmigo culpas y resentimientos. Fue una época difícil para un simple niño. Me formé una actitud madura con el paso del tiempo, el momento se acercaba; pero, quien diría que alguien me impediría volver. Un sentimiento surgía, algo que no quería sentir pero yo mismo sabía que pasaría. Ella me apoyaba, me aconsejaba, y a pesar de saber mi secreto, se mantuvo a mi lado... "No eres un monstruo. Si lo fueras, yo lo hubiera notado desde el primer momento en que te vi" He vuelto a resubir la historia, espero la disfruten Sweetzy