Isai es un adulto joven que vive sólo con su gato en un apartamento apretado en una zona muy transitada de su ciudad. Lleva ya unos años soltero. Ultimamente no sale mucho y a sus amigos mas cercanos los ve 2 o 3 veces al año. Vive una vida rutinaria trabajando sólo para llegar a fin de mes. Isai tuvo varias novias, una que otra aventura y uno que otro desliz. A su vez tiene una madre y una hermana, a las cuales al igual que a sus amigos, visita de vez en cuando. Su padre falleció cuando era muy pequeño y de recuerdo solo quedaron sus fotografías. Isai trabaja en un pequeño cubículo de un edificio en la zona bancaria. Cuya jornada laboral es aún más asfixiante. Ante tal situación, él jamás hubiera pensado que el reencuentro con un viejo amor del pasado fuera a girar su vida por completo cambiando su mundo de piez a cabeza. Isai aprendería que aveces, los momentos mas inexorables traen consigo las lecciones de vida más duras pero tambien más valiosas. Que aveces nos sirven para conocernos a nosotros mismos y asi poder ser mejores. Poco a poco. Un día a la vez. Paso a paso y sin prisa, ya que el camino es largo e inexplorado. Pues la experiencia es algo inesperado que vivimos y de lo cual aveces aprendemos algo.