El pasado es ese algo en el que podemos refugiarnos. Cambiamos y recreamos recuerdos para sentirnos bien, nos mentimos a nosotros mismos. Alteramos la realidad que vivimos porque ya no está y no tenemos que defenderla ante nadie, está solo en nuestras mentes. ¿Y el futuro? Ilusión, esperanza, planes...nada está alterado por realidad agobiante, todavía son sueños virgen, llenos de expectativas y de nuevo, más mentira. Por eso compramos, por eso retratamos fotos en marcos, por eso tomamos alcohol. Queremos olvidarnos de que no podemos sentir la plenitud del momento, creamos momentos inexistentes porque no existe "este instante". Este instante, duró un solo segundo. Ya se fue, no existe. Tal y como esa idea aurática que llamamos presente. Por eso, esta vez engañemos nosotros al tiempo: Empecemos por decir adiós. Libro de poesía ilustrada.