~shhh... te veo en mi balcón~
esas palabras, se quedaron simplemente, no podía dejar de recordarlas, me dieron escalofríos de pensar en él otra vez, pero nadie quiere nada conmigo, y menos alguien como él.
~shhh... te veo en mi balcón~
esas palabras, se quedaron simplemente, no podía dejar de recordarlas, me dieron escalofríos de pensar en él otra vez, pero nadie quiere nada conmigo, y menos alguien como él.
Nunca debí caer por él.
Sin embargo, tampoco detuve mi descenso.
Nada logró apaciguar las maliciosas llamas de deseo que se prendieron dentro de mí.
No su frialdad.
No su silencio.
No sus advertencia...