El plan era simple. Fingir una relación con su amigo travestido para permanecer un poco más de tiempo dentro del closet. Algo cobarde, es justo admitirlo. Una noche, besos sin consentimientos y mucha bebida después, Kouryu pierde control y racionalidad. Su amigo no estuvo muy feliz por eso. Los deseos reprimidos por su pequeño mejor amigo salen a flote, incapaces de controlarlos nuevamente y su amistad pende de un hilo luego de un pedido poco ortodoxo. "-¿Entonces? ¿Qué dices? -Qué estás jodidamente loco. "