Hay tantos dioses como estrellas, los dioses humanos, los de las estaciones, los de las razas etc. Hay tantas razas como constelaciones, vampiros, cambiaformas, hadas, demonios, humanos , etc. Razas que se odian las unas a las otras, de Vapiros a cambiaformas, humanos a todos los demás. Pero cuando el cuarto menguante de la luna brille en su punto más alto y se transforme en su luna llena de sangre, la cúspide del odio de las razas se presentara y traerá consigo la nueva era. Cuando el Rey de la sangre y el Dios licano vuelvan a la tierra para llevar a sus razas a su tierra prometida. Cuando la Azada del silencio sea forzada y lleve consigo el final de este mundo y el comienzo del siguiente. Y ese día será cuando un alma que no piensa solo en si misma rompa las barreras de su odio para acoger a el ser desconocido y crear el amor.