Imagina ser una chica impaciente en una ciudad sin tráfico. Estar en un colegio con uniforme y no tener que pensar qué ponerte cada mañana. Que los profesores conozcan tus problemas y dificultades pero también tus habilidades. Que nunca hayas cambiado de amigas. Así es como Carlota va a tener que afrontar su nueva etapa, Bachillerato, en una ciudad grande con mucho tráfico. Pensando todas las mañanas en qué ropa ponerse y en muchas preocupaciones normales para una chica de su edad.