-Les juro que no se nada -Contesta Natalia a la policía desesperadamente viendo el cuerpo - Yo vine pedirle que me dejara en paz - miraba sus manos llenas de sangre mientras caían lagrimas por sus mejillas.
-Les juro que no se nada -Contesta Natalia a la policía desesperadamente viendo el cuerpo - Yo vine pedirle que me dejara en paz - miraba sus manos llenas de sangre mientras caían lagrimas por sus mejillas.
En un mundo en el que luchar contra las maldiciones es rutinario para los Hechiceros.
Un joven pelirosa ya retirado, tendrá que hacer frente a las adversidades que le pone la vida, cuidando de su peq...