La vida te golpea de mil maneras diferentes, te lanza a un vacío que en la mayoría de veces es imposible salir y, te repite una y otra vez lo débil que eres. Pero siempre, siempre llega a alguien que te sostiene de su mano y te hace ver que aún en los días grises, la vida es bella y que vale la pena vivirla. Porque ella llegó en medio de una tormenta, esquivó los rayos y las inundaciones hasta llegar a mi. Y me sostuvo tan fuerte que unió cada tramo que se habían quebrado con el viento. Me sostuvo en sus brazos y me Llevó a tierra firme y ahí me enseño el verdadero sentido de la vida.