Hay personas que, simplemente, lo hacen bonito. Y da igual el lugar, la hora, o en el momento en que te encuentres. Hay personas que hacen que un instante se vuelva inolvidable, que un día malo se convierta en bueno, y que una sonrisa lo cambie todo por un rato. Hay personas que son pura vitamina. Las que te recargan las pilas con solo tenerlas cerca. Y donde te quedarías siempre un poquito más. Las que se convierten en hogar, y a las que siempre te dan ganas de volver. Hay personas que, simplemente, sí. Y ya está.
3 parts