¿Es posible que estés destinado a estar con una persona a pesar de no concerla? ¿Y también es posible odiar y amar tanto a esa persona a la vez? Todo comenzó con una antigua tradicion que había sido imposible de ignorar durante milenios. Cada persona, al cumplir los diez años se le otorgaba una especie de marca en el cuello. Allí estaba escrita la primera frase que diría su alma gemela al encontrarse. Todo el mundo estaba emocionado y encontraban a sus destinatarios antes de lo previsto, pero nuestro rubio no tuvo tanto suerte. ¿Tal vez no estaba hecho para el amor? ¿Tal vez su marca estaba mal? ¿O el problema era que esperaba una chica? Desde luego no esperaría que la persona que llevara tanto tiempo esperando fuera Inosuke Hasibara. Si, el infeliz con cabeza de jabalí.
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