Él miró su espalda: "Se fue sin mirar atrás ni una sola vez... Ni una sola vez..." y ella tembló bajo la nieve, "¿Para qué vine a Nueva York? ¿Para ésto?. .. ¿Para qué?" Porque ellos, y nadie más, habían decidido: ella se había ido sin mirar atrás y él no había corrido tras de ella. Ambos se habían perdido, sin luchar. Ambos se habían abandonado.
9 parts