No sé cómo, ni por qué nací y menos para qué. Solo se, que las voces que llevo en mi interior que me acompañan desde mi primer recuerdo, siempre estarán ahí. Una es tímida y responsable, solo busca el que se haga la bondad. La otra, por el contrario, es atrevida y juguetona, sarcástica y lo único que la importa es ella misma y la diversión. Luego estoy yo, la mezcla de ambas.