Capitulo 39

4.2K 181 66
                                    

NOA:

La mano de la rubia jalaba de la mía, llevándome a algún lado que desconocía. Pasamos por mucha gente, esquivando y saludando a un montón de personas que se divertían entre ellos. Cuando cruzamos una puerta, pude deducir que estabamos en un cocina.

Las dos solas.

Bianca tomo un vaso llenándolo de vino, extendiéndomelo. Negué y ella carcajeó tomando el líquido morado.

-Apenas nos conocemos y ya desconfías de mi...- me mira absorta.

Te estás cogiendo al hombre de cuál estoy enamorada, logicamente no saltaré de la felicidad.

-No tomo alcohol...- espeto con necedad. Ella asiente tomando lugar en una de las sillas.

-Noa...- susurra mi nombre mientras con uno de sus dedos palpa la copa- "delicia"...-

Frunzo mi ceño con duda. Esta nota mi extrañez- Ese es el significado de tu nombre, niña- se pone en pie para tomar la botella de vino y empinársela contra su boca.

-¿Sabes que significa mi nombre, bonita?- se acerca hacia mi, escondiendo una de sus manos por detrás de su espalda.

Maldita, esta trama algo.

Me niego a responderle fijándome en sus ojos color azul celeste. Unos ojos muy bellos pero llenos de perversidad.

-Mi nombre quiere decir "mujer brillante", pero déjame confesarte que me gusta mucho más mi segundo nombre, "Crowe" que se asocia con "pájaro de la muerte"- mis manos comienzan a sudar cuando saca un afilado cuchillo- Y me encanta deshacerme con lo que se interpone en mi camino- pasa la punta del cuchillo sobre mi cuello, haciendo un recorrido desde este hacia mi mentón.

-Bianca, no me asustas...- y aunque me expreso segura y certera, el pavor se estaba apoderando de mi sistema. Ella ríe con antipatía.

-No pretendo que me tengas miedo, pretendo que no te acomodes conmigo, y mucho menos con Mateo- junta sus dientes con furia y yo alzo una ceja ladeando una sonrisa arogante.

-¿A caso te molesta que Mateo me prefiera a mi?- pregunto con serenidad. El cuchillo no llega a clavarse en mi piel pero si maltratarla dejándola rojiza.

Carcajea- Ay bonita, yo ya sé que Mateo me prefiere a mi, a ti solo te utiliza cuál juguete igual que a todas las que han pasado por sus sábanas- una punzada se hace lugar en mi pecho.

¿Así que para él tan solo he sido un juguete?

No puede ser, todo lo que ha hecho por mi...

-No jodas Bianca, eso hace entender que tú también fuiste uno de sus juguetes...- me apego a su rostro encarándola.

Ladea su cabeza y aparta el cuchillo.

-Uno de sus favoritas, esos que nunca puedes soltar, que por más años que pasen los sigues viendo como una parte de tu niñez y es imposible que alguien lo arranque de tus manos, por esa simple razón me prefiere mucha más a mi- espeta con grandeza y niego con diversión.

-Que poca dignidad tienes...- le espeto en su rostro.- Déjame decirte una cosa...- me apego más a ella con valor- Conmigo no juega nadie, y eso él lo tiene más que claro, porque acá sigo yo, y él estaría dispuesto a matar porque nada ni nadie me lastimara-

Se que sonaba engreída pero ella no sería una de las personas que me pasaría por encima.

-¿Tan segura estás?- juega con el cuchillo en sus manos.

-Muchísimo...- susurro.

-No te mato por respesto a Mateo- espeta con repulsión.

-No lo haces por respeto a tu vida...- una voz varonil se escucha en la puerta de la cocina. La voz de Mateo.

Se acerca quedando a mi lado con sus manos en sus bolsillos, mirando con detención a Bianca.

-Mateo...- llama su nombre con dulzura.

-Cállate Bianca...- murmura este entre dientes- Deja la hipocresía de lado por un rato, ¿si?-                  

Bianca aprieta sus puños.

-Eso no te importaba cuando me cogías en tu cama, ¿cierto?- empuña de vuelta el cuchillo y yo no soy capaz de reaccionar ya que un sentimiento de vacío me inunda el pecho.

-Me importa tan poco lo que haya hecho contigo que ni siquiera me acuerdo de eso...-toma mi brazo y Bianca derrama unas lágrimas antes de levantar el cuchillo en mi dirección.

-¡Pues tampoco la recordarás a ella!- se intenta abalanzar sobre mi pero Mateo es más audaz y le arrebata el cuchillo lanzándola contra la mesa arrojando todo lo que hay encima de ella.

-Vamonos ya, Noa...- suelta el cuchillo dejando a la mujer llorando mientras jala mi brazo fuera de la gran mansión. Literalmente corre hacia el auto y yo me detengo obligándolo a que haga lo mismo.

-¡¿Qué mierdas haces Noa?! ¡Date prisa!- grita con desesperación.

Trago grueso y dejo que las palabras salgan por si solas.

-Mateo, ¿tú me amas?- empuño mis manos.




¿Otro cap? Ah

Les dejo este huequito para que me pregunten lo que quieran, por si tienen alguna duda de la historia<3

Nay🦋






𝐂𝐡𝐨𝐫𝐫𝐨-ᴛʀᴜᴇɴᴏ[✔️]Where stories live. Discover now