Advertencia: Se hacen algunas insinuaciones subidas de tono en este capítulo, si no te gusta ese contenido, puedes ignorar este capítulo, si te quedas a leerlo, atente a las consecuencias.
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El 25 de Diciembre siempre fue un día difícil para él, ya que eran pocas las veces que podía celebrar junto a sus padres el día de su nacimiento, sin embargo, desde que la conoció a ella, todo había sido muy diferente.
Le agradecía eternamente por quedarse a su lado
Despertar a su lado siempre fue una de las mejores cosas que podía ver, sin importar cuanto tiempo pasara desde la primera vez que lo hiciera.
Mi mirada fue directo a cierto anillo, que decoraba su dedo desde ya hace un buen tiempo, prometiéndome que se quedara a mi lado para siempre.
Me levanté de la cama, sin moverme demasiado para no despertarle, me encantaba verle dormir, y ser el único que pudiera hacerlo.
Tomé una ducha y empecé a arreglarme.
Estaba harto del traje, pero debía ir a trabajar
Justo cuando buscaba una corbata, una mano se extendía hacia mi, ya con una elegida.
- ¿Te desperté? - Volteé para poder mirarla, vestida solo con las cobijas a su alrededor, mostrándome una hermosa sonrisa.
- Tu tranquilo, aunque no me hubieras levantado, no puedo seguir durmiendo después de que te vas - Un par de brazos rodearon mis hombros, mientras anudaban la corbata alrededor de mi cuello, viendo en el espejo que me quedaba perfecta.
- ¿Cuál es el plan para hoy? - Un beso de buenos días nos sacaba una sonrisa a ambos.
- Depende de la hora en la que planees regresar -
- Regresaré en un par de horas, solo debo ir de emergencia, la mayoría de ellos sigue de vacaciones por Navidad -
- Ok, entonces, ¿salimos o nos quedamos en casa? -
Contigo, donde sea
- Prefiero quedarme, las calles aún están repletas -
- Ok, entonces dejó que te sigas arreglando, iré a preparar el desayuno - Ella se levantó de la cama, mientras veía como las cobijas se deslizaban por su cuerpo, dejándome ver su piel por un momento.
Al terminar de arreglarme, salí de nuestro cuarto para dirigirme a la cocina, allí la encontré, vestida solo con su ropa interior y con un mandil.
La veía desde lejos, mientras se encontraba concentrada en el desayuno, tarareando un villancico navideño.
Me acerqué, rodee con mis brazos su cintura, abrazándole.
- ¿Estás intentando provocarme? - Deje varios besos en su cuello, mientras ella intentaba que el tocino en el sartén no se quemara.
Estaba pensando seriamente no ir a trabajar
Dejé que terminara de cocinar, para después hacer que me miré, haciendo que voltee sin soltarla, para darle un dulce beso en los labios.
Ella pasó sus brazos por mi cuello, acariciando lentamente mi cabello, mientras yo disfrutaba del sabor de sus labios.
- Tal vez - Contestó después de separarnos - Pero debes ir a trabajar -
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De nuevo en tus brazos (Karma Y Tú)
Fanfiction(T/N) Shiba es hija de una reconocida familia de asesinos, y por ello tuvo que alejarse del que alguna vez fue el amor de su vida. Ahora, después algún tiempo del incidente, ya podrá volver a verlo. Los personajes no me pertenecen, son propiedad de...
