first love ;; minjoong

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Mingi se había quedado preocupado.
Además de que ver a Hongjoong llorando la otra noche le afectó, se escuchaban a veces gritos desde su departamento. Oía las peleas que tenía con una mujer.
Por ello el castaño le había pedido el número de teléfono al peliazul, por las dudas. Aún así, no podía fingir. Ya había descubierto por qué aquel chico le parecía familiar, había sido su primer novio.
Recordaba que se habían amado más que nada en el mundo. Y, en lo profundo, Mingi nunca dejó de quererlo.

Tenía que admitir que Kim se encontraba cambiado, casi irreconocible. Pero Song todavía mantenía en su memoria su risa, las miradas, los besos...
Luego de dos semanas de encuentros y charlas casuales, Mingi descubrió que deseaba acercarse a Hongjoong de nuevo. Pero no sabía cómo.

El de piel morena sospechaba que Hongjoong también lo recordaba, pero ninguno de los dos se animaba a traer ese tema de conversación.

Luego de ver cómo su primer amor sufría, ya que luego de verlo llorar una primera vez, también lo vió una segunda, Mingi quería hacer algo, quería ayudarlo. Y, si es posible, volver a recuperar a Hongjoong; volver a enamorarlo.
Primero, debía ganar su confianza.

• • •

Hyen estaba extraña. Hongjoong lo notó por la extrema amabilidad y generosidad que le brindaba su esposa. Y no se quejaba, pero era demaciada de una semana para la otra, y la conocía, no encontraba un sentido para que actúe de esa manera.
Su esposa sonreía todo el tiempo, lo atendía, e incluso no le comentaba nada negativo acerca de su escritura.
Hongjoong temía que algo sucedía de por medio.

-Hyen... Voy a ir a cenar con mis amigos, volveré tarde, buenas noches. -Informó el de hebras azules el viernes a la noche.

-¡Si, querido! No pasa nada. - Hongjoong hizo una mueca de confusión para sí mismo al salir del departamento. Hacía mucho tiempo ella no le hablaba así, ¿Por qué de pronto parecía que lo adoraba de nuevo?

Cuando estaba casi llegando a la casa de Seonghwa, Kim se tocó el bolsillo del pantalón, y notó que se había olvidado su billetera y celular.
Molesto y suspirando, le pidió al taxista que vuelva a su edificio.

Llegó a su departamento y, a punto de abrir la puerta con su llave, oyó ruidos dentro. Parecía que algo estaba golpeando. Extrañado, apoyó la oreja contra la superficie y se llevó la completa indignación al escuchar un gemido.

Abrió los ojos de par en par, y entró decidido al lugar.
La escena que vió, además de romper su corazón, lo dejo atónito.
Su esposa estaba con otro hombre. Estaban teniendo sexo, en su sillón, en la sala de su departamento.
Hyen montaba al hombre desconocido sin vergüenza alguna, y los dos estaban envueltos en tanto placer que ni siquiera se dieron cuenta que alguien estaba parado en el pórtico mirando su acto pudoroso.

-¿¡Hyen?! ¿Qué...? -pronunció como pudo Hongjoong, quien ya sentía un dolor en el pecho, y los ojos llorosos.
De pronto entendió por qué su esposa estaba tan amigable, sentía culpa porque lo estaba engañando.

La nombrada por fin se dió cuenta de que su esposo estaba presente. El hombre debajo de ella miró en la misma dirección y maldijo en voz baja.
Se separaron y trataron de taparse como pudieron, en vano.

-Hongjoong, te lo puedo explicar. - Con una expresión preocupada, la mujer intentó acercarse a su supuesto marido.

-¿¡Explicar?! ¿Que tienes que explicar? ¿Que me estás engañando? Me dí cuenta.