ASESINO EN SVIYAZHSK

Cap#13- TODO SE ACABÓ

Cuando era niña, tenia miedo de la oscuridad, recuerdo aquel primer día, me llevaron por unos pasillos enormes, yo solo quería correr, quería salir de allí, tenía mucho miedo, sin embargo no podía, solo me limitaba a llorar mientras caminábamos.

-shh, por dios callate niña- me dijo en susurro la mujer que me llevaba casi a rastras a una habitación - escucha-me dijo poniendose a mi altura-más te vale no seguir llorando, o vas a despertar a los demás mocosos, y si lo haces, tu lugar será alla- apuntó a una puerta lejos de allí, estaba completamente cerrada, parecía una prisión, yo me limpie las lágrimas con la manga de mi sueter- así que callate-dijo empujandome hacía aquella habitación fría, donde estaban muchos niños, el silencio reinaba en aquel lugar, solo se escuchaban mis sollozos y los zapatos de aquella mujer - bien, ahora duerme-me entrego una sabana y una pequeña almohada-mañana tenemos trabajo niña-dijo llendose de allí.
Recuerdo mirar a mi alrededor, todo era obscuro, me subí a la cama y comencé a llorar de nuevo, pasaron alrededor de 15 minutos.....
-shhh, más vale que guardes silencio-escuche una voz cerca de mi, limpie mis lágrimas para poder ver mejor, era una niña rubia, un poco gordita y con una sonrisa sobre su rostro-no querrás que te escuche la rectora cierto? - yo negué con mi cabeza
-soy katya, katya dorosh-estiro su mano tratando de saludarme, yo solo la observe-eres muy pequeña-dijo sentada en el piso a un lado de mi cama-escuche que vendría una niña nueva,y quise saludar - me miró con gran extrañeza

-como sabes que soy yo-por fin hablé

-por qué eres muy llorona-se burló haciendo que comenzará a llorar de nuevo

-oye no... no fue mi intención, disculpa- dijo preocupada

-quiero ir a mi casa, quiero a mi mami- lloré aun más fuerte

-creo que eso será difícil-dijo triste viendo hacia el piso

-tengo miedo-confesé llorando

-quieres que me quede contigo? - yo moví la cabeza asintiendo

-vale, pero solo será hoy ok?, después tendrás que vivir por ti sola-se acomodó a un lado de mi, haciéndome la compañía que necesitaba.
Definitivamente no sólo fue ese día, todas las noches katya iba a mi cama, y se acostaba conmigo podía dormir tranquila y al cabo de un tiempo nos acostumbramos, se convirtió en nuestra rutina, katya se convirtió en mi otra mitad, en mi confidente..

*********
-lena-decía julia en susurro

-si, lena-le contestó katya mirándola por el retrovisor, iba manejando a velocidad récord-esa idiota me va a escuchar cuando la vea, es una jodida idiota, como mierda se atrevió a amenazarme así - volvió a mirar a julia quien no se miraba nada bien - aguanta yulia, estarás bien, ya casi llegamos-dijo preocupada pisando el acelerador

***********

Suspiré pesadamente recordando aquello, podía odiar la obscuridad, pues me hacía sentir sola,me hacía recordar lo más difícil de mi vida,sin embargo,con  katya a mi lado, me hacía sentir fuerte.

Parecía que la lluvia por fin había cesado, respire profundo y resople - bien, aquí vamos-

-mierda este lugar si que esta obscuro-susurre mirando a mi alrededor, la neblina no me permitía ver más allá de mis manos, me acerque a un árbol lentamente y lo observe, era inmenso, no podía ver hasta donde llegaba, su inmensidad me hacía sentir tan pequeña y a la vez.... Perdida, volví a suspirar juntando mis manos tratando de calentarla, el frío me helaba los huesos, para ser sincera, estaba asustada, le di la espalda a aquel árbol junto al lago y me senté recargando mi espalda en el.

-bueno, yo no iré a buscarte maicol, así que me quedaré aquí, por que se que tu lo harás - cerré mis ojos concentrandome.... en la escuela había aprendido a agudizar mis sentidos, lo había echo un montón de veces...no podía ver, así que agudice mi oído, podía escuchar las gotas de agua atrapadas en las hojas que caían al suelo, escuchaba mi respiración e incluso podía escuchar mi corazón latir.
De pronto sonreí - eres tan inteligente maicol, que nos has engañado a todos, tenías muchas ventajas a tu favor... mierda- estaba segura que maicol volvería, y también sabía que estaba esperando a que fuera a buscarlo.
-me crees tan idiota como para irte a buscar? - sonreí para mis adentros, pues yo no conocía aquel bosque, el si, y conocía cada rincón de él, sería muy tonto caminar aquí