❌Paciente 19❌ [P.J]

❌Ocho❌

El joven se encontraba sentado en su cama, frente a la puerta, lentamente levantó la cabeza y sonrió, esa sonrisa tan macabra que asustaría a más de uno y claro que ella se asustó.

-Buenos días, Doctor Min- Su voz, tan suave y tan psicópata, una combinación que te llevaría a la locura con tan sólo escucharla de lejos.

-Ella es la señorita ___, será tu nueva enfermera- Tragó en seco cuando la mirada del Jimin se clavó en ella, examinándola de pies a cabeza, como si sus ojos fueran una cámara que no quiere perderse ni el más mínimo detalle.

-Buenos días, Jimin- Trató de mostrarse firme y sin miedo e hizo una reverencia.

El joven Jimin se levantó de la cama y caminó hasta ella, YoonGi se colocó frente a ella cuando Jimin se encontraba a unos cuantos pasos.

-Déjelo, tengo que conocer a mi paciente- Le dijo sin dejar de ver a Jimin, quien levantó una ceja y sonrió de lado al escuchar su comentario.

Suga se apartó aún con inseguridad y dejó que Jimin se acercara a ___.

-Buenos días, Señorita ___- Escuchar su nombre ser pronunciado de esa manera tan macabra pero a la vez tan dulce, le hizo poner los pelos de punta.

No hablaban, sus ojos eran su medio de comunicación, como la telepatía.

-Y dígame, ¿Ya le contaron el suceso de ayer?- Tomó un mechón del cabello de la joven y comenzó a enredarlo en su dedo jugando él.

-Sí, me lo han dicho, pero me gustaría que tu me contarás tu historia- El rostro del joven se oscureció de inmediato, tomó a la joven del cuello de su camisa y la acercó bruscamente a él, quedando nariz a nariz.

-¿Usted no sabe nada de mi?- Escupió esas palabras con tanta ira que logró alarmar a YoonGi, provocando que tomará una de las muñecas de Jimin para que la soltara.

-Déjelo Doctor, yo me encargo- Dijo sin despegar los ojos de la profunda e intimidante mirada de Jimin.- No, tienes razón, no te conozco, pero tengo la intención de hacerlo y no sólo porque eres mi paciente- Fue acercando sus manos lentamente a las muñecas de Jimin- Se que tu vida fue y es un infierno, yo puedo ayudarte a cambiar eso, pero tienes que dejarme entrar en tu mente y en tu vida para poder hacerlo- Tenía a la muñecas del joven entre sus manos y él aún no la soltaba.

-Créame, no quiere meterse en mi mente- La acercó más, casi rozando sus labios.

-Sí, sí quiero y voy a hacerlo, no por trabajo, no por interés, sino porque me importas más de lo que crees- Consiguió que el agarre se aflojara un poco y pudo alejar sus rostros, quedando cara a cara.

Pasaron unos pocos segundo y Jimin la soltó por completo, acomodó su camisa y vio al joven paciente caminar lento hasta la cama para luego volver a sentarse, sosteniendo aquella sonrisa macabra del principio.

-Bienvenida al infierno, señorita ___, espero que haya disfrutado de sus años de cordura-.

Ganas de llorar se acumulaban en su pecho cuando Jimin comenzó a reír como el demente que es, YoonGi se apresuró a sacarla de aquel lugar y una vez afuera la abrazó, dejando su rostro pegado a su pecho.

-Tranquila, no tienes que hacerlo si no quieres, podemos buscar otro paciente-.

-No, no, quiero hacerlo, se que puedo hacerlo... Y lo haré- Le contestó separándose de su pecho.

El doctor le dio una mirada comprensiva y volvieron a caminar por los pasillos, continuando así el tour por el hospital.

Felicidades, ahora tienes paso a la locura, a tu perdición...

-Que comience el juego- Dijo y volvió a reír...