▪One Shots | NCT▪

☄ʜᴀᴇᴄʜᴀɴ☄

La rutina de Haechan los fines de semana siempre era lo mismo, jugar todo el día en la computadora e ignorar tus propuestas para salir. A veces también usaba la típica excusa: "dame 5 minutos y después hacemos todo lo que quieras" y esos 5 minutos luego se convertían en dos horas más; pero esta vez sería la excepción porque Haechan no puede resistirse a algo. Complacer a su baby. 

Por más loco que suene Haechan adora, no, ama complacerte en todos los sentidos, aún estando en su papel de daddy cuando se supone que él es quién debería poner los límites, no tú.

Te levantaste de la cama y retorciste los ojos cuando miraste la pantalla del ordenador, era tu juego favorito, le pediste a Haechan jugar con él, pero prefirió hacer la partida en línea con Jisung. La próxima vez que te toparas con Jisung lo regañarías por eso.

El hoodie que tomaste sin permiso del closet era demasiado grande para ti, no dejaba ver el short que llevas puesto. Perezosamente te acercaste a la mesa y antes que pudiera presionar el botón de iniciar partida apagaste el equipo. Si no entendía por las buenas, iba a entender por las malas.

—¿Qué crees que estás haciendo? Te dije que no molestaras — su tono de voz cambió a uno más severo, sabías que entraría en su papel —Baby está siendo muy mala en estos momentos, si sigues comportándote así tendré que castigarte.

Empujaste un poco la silla para ubicar tus piernas a los lados de las de Haechan, te sentaste en su regazo y te permitiste el lujo de poner tu cabeza en su pecho para escuchar los latidos de su corazón. Aun confundido te envuelve con sus brazos mientras que con un dedo hace rulito un mechón de tu cabello.

—¿Fui muy grosero? —asentiste pese que no era del todo verdad, pero una pequeña mentira piadosa no estaría mal —Discúlpame, a ver ¿Qué desea hacer mi princesa?

Las palabras no son tu fuerte, te expresas mejor con las acciones, por lo que uniste tus labios con los de Haechan en un inocente beso, pero para él no era suficiente, te tomó por tu nuca acercándote una vez más, suspiraste por asombro y Haechan aprovechó esta acción para introducir su lengua en tu boca.

De un momento a otro la habitación estaba llena de suspiros y gemidos entrecortados, el volumen aumentó cuando Haechan hizo a un lado tu cara, dejando expuesto tu cuello y sin más lamió, chupó y mordió para dejar una marca. Al terminar sonrió porque contrastaba demasiado con el color de tu piel, esa marca no pasaría desapercibida.

Se separó un instante para ver como te encontrabas, el cabello despeinado, unas cuantas gotas de sudor en tu frente, las mejillas rosaditas a más no poder y los labios sumamente hinchados por las mordidas hicieron latir desenfrenadamente el corazón de Haechan, además que podía sentir como su erección iba creciendo a tal punto de llegar a doler por rozar con el pantalón.

Antes de poder continuar en lo suyo la puerta se abrió de par en par, mostrando un Doyoung algo —un tanto— enojado.

—Por favor —habló entre dientes— si van a hacer esas cosas vayan a otro lado, sé que puede ser difícil porque es la etapa en que todas sus hormonas están alborotadas, pero contrólense chicos, sean discretos como Jaehyun y...—de la nada apareció Jaehyun cubriéndole la boca con su mano.

—Sentimos interrumpir, Doyoung ya nos vamos, ¿verdad?

—Sí, sí, tenemos cosas que hacer — la puerta fue cerrada de poco a poco y cuando se cerró completamente se pudieron escuchar algunos murmullos detrás de ella.

Después de tan rara escena ambos rieron a carcajadas, Doyoung estaba a punto de revelar el secreto de Jaehyun, aunque todos ya sabían sobre que se trataba.

Como ya habían sido interrumpidos decidieron pasar la noche de una manera muy simple, Haechan se dirigió a la cocina para preparar los paquetes de ramen mientras buscabas algo que ver en el catálogo de Netflix, porque de verdad verían Netflix. No hubieron toqueteos innecesarios a como ustedes piensan. 

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Recuerden que acepto pedidos en los comentarios o por priv !!

—Jaexg