10. Soy una bruja

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~Narrador omnisciente~

—Sabes que no deberías estar aquí, no después de lo de ayer —le reclamó el joven.

Elizabeth se ruborizó y se apenó por lo que había pasado el día anterior.

El futuro Lord Yates se carcajeó.

Sonrió nerviosa, no estaba lista para empezar a aceptarlo.

Yates se frotó el entrecejo relajandose para lo que se avecinaba.

— Un intento más es lo único que te pido, ¿me lo darás?

—Pude haber tratado mal a tu madre, Yates, pero ahora trataré de no hacerlo — aseguró molesta de tener que prometer algo que no cumpliría por voluntad propia.

El joven observó su rostro y se dio cuenta de que en serio lo haría, sonrió.

La joven no sabía si lo que acababa de decir era lo que de verdad sentía o solamente lo que sabía que Aubrey querría escuchar, como fuera ya lo había dicho y tenía que hacerse cargo. Porque a pesar de los muchos defectos que tenía, le gustaba cumplir sus promesas, aunque a veces le costaba un poco.

—Lloraría de felicidad por lo que acabas de decir, novia mía, pero los hombres no deben llorar — confesó y a Elizabeth le pareció rídiculo pero mejor se guardo sus comentarios para sí misma. 

—Excelencia, por supuesto que no, eso se vería mal en usted —ironizó.

—Una lagrima jamás saldrá de mis ojos, tenlo por seguro.

Elizabeth sonrió también enseñando sus blancos dientes, pero, a diferencia del joven, ella lo hacía por compromiso.

—Está bien, ¿a dónde pretendes llevarme hoy? —cambio de tema la joven.

¡Que vergüenza! No lo había pensado, pero ya veré que hago, pensó Aubrey.

La sonrisa de Elizabeth no era falsa en esta ocasión, le gustaba salir de la rutina, y estos últimos días con Linden así había sido. Al principio se había mostrado resistente al cambio pero ahora podría empezar a aceptarlo.

—Su vida cambiará el día de hoy, le mostraré el bar clandestino de mi familia — bromeó —. Un chiste común.

La atrajo hacia él, sin que Elizabeth se lo esperara y con todas sus fuerzas Aubrey se contuvo de besar esos carnosos labios que tanto deseaba probar. Debía contenerse porque no quería asustarla o algo parecido. 

Elizabeth asintió incapaz de negarle un beso a su, ahora, novio; por lo que se fundieron en un beso tranquilo.

—¿Tienes un plan, o no? Llamame bruja, Linden, pero estoy segura de que habías olvidado nuestra cita de hoy, ¿no es así?

Sí es bruja, pensó Aubrey. 

—Si, estás en lo correcto. Lo había olvidado pero, ahora quiero saber... ¡¿mi novia es una bruja?!

La joven se echó a reir por lo que Aubrey había dicho, lo que le causó más gracia fue la manera en que lo había dicho, como si en verdad temiera que la respuesta fuera afirmativa. Gracias a esa reacción de su parte, su novio supo que no era verdad.

Unieron sus manos y salieron de allí. ¿Quién lo habría pensado, los hijos de dos personas que se amaron antes ahora juntos? Elizabeth no sabía sobre ello pero pronto el destino se encargaría de contarle. Por el momento Aubrey y ella debían preocuparse solo por ser felices juntos.  

Un saludo grande, Zabeth_Bany! 😶

Maintenant si c'est de l'amour (PGP2023) Where stories live. Discover now